La llegada del secretario de estado, Anthony Bliken, a Ciudad de México está siendo esperada por millones de inmigrantes. Aproximadamente unas 7.500 personas de varias nacionalidades se encaminaron en una caravana para presenciar la conversación entre EE.UU. y México sobre la crisis migratoria.
El Político
La caravana de migrantes sigue en pie, tras un largo día de caminata través de México hacia la frontera sur de Estados Unidos el miércoles, horas antes de una reunión programada entre el secretario de Estado, Antony Blinken, y el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Más de 7 mil personas de 24 países diferentes forman parte de esta gran travesía. Luis García, organizador de la caravana y activista, dijo a NBC que un grupo de mujeres, niños y enfermos ya estaba más adelantado.
La mayoría de los migrantes son de Centroamérica, Cuba, Venezuela y Haití, dijo, pero algunos vienen de lugares tan lejanos como Turquía, Irán, Siria y Camerún, según NBC.
La caravana no está destinada únicamente para recibir autorización y acceso a los Estados Unidos. Muchos de los migrantes esperan documentos para poder quedarse en México y encontrar trabajo y ayuda humanitaria.
Los migrantes esperan recibir la atención y la ayuda del gobierno mexicano, dijo García Villagrán a NBCNews.
"Las condiciones en las que caminan los compañeros, las mujeres y los niños migrantes, son verdaderamente deplorables", dijo.
Reunión de Anthony Bliken y AMLO
El viaje de la caravana se produce cuando Blinken, López Obrador, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall.
La reunión se centra en discutir "la migración irregular sin precedentes en el hemisferio occidental e identificar formas en que México y Estados Unidos abordarán los desafíos de seguridad fronteriza", según un comunicado del Departamento de Estado.
Sin embargo, activistas y migrantes aseguran que dicho encuentro se basó "totalmente en cuestiones electorales". En época de campañas, para el gobierno demócrata de EE.UU., quizás no le vendría mal nuevos votantes a su favor.
"Las mujeres y los niños migrantes están siendo utilizados como moneda de cambio", dijo Luis García, el líder de la caravana de migrantes.
