Este lunes el cardenal Norberto Rivera Carrera llamó a la "unidad" y al "diálogo nacional" ante la posibilidad de que hayan nuevas "crisis" e instó a dejar de lado las "confrontaciones". En su homilía dominical en la Catedral Metropolitana dijo que "necesitamos unir esfuerzos para enfrentar las dificultades que se puedan presentar en nuestra patria.
“Necesitamos impulsar un diálogo nacional y evitar las confrontaciones estériles para lograr la unidad que tanto necesitamos para progresar en educación, trabajo y solidaridad. En nosotros está la solución a las crisis que pueden llegar, no del norte o del oriente".
En el tercer domingo de adviento, insistió en que se debe ir al encuentro de los más necesitados y privilegiar la "solidaridad" y la "fraternidad".
"Ojalá que nosotros mismos nos unamos a aquellos que están saliendo al encuentro de los más necesitados, en lugar de quedarnos sólo en lamentaciones y maldiciendo a las tinieblas. Para el que no quiere entrar en la dinámica de la solidaridad, la fraternidad siempre hay excusas al alcance de la mano.
"Se rechaza una actitud lo mismo que la contraria, se critica una propuesta y luego la otra. Siempre hay motivos. Siempre hay justificaciones siempre hay excusas para quien no quiere cambiar ni convertirse para quien no quiere abrir su corazón a los demás ofreciendo su reconciliación u ofreciendo una ayuda a los más necesitados y abandonados".
Subrayó que "a todo se le puede dar la vuelta, es la prueba de la falta de sinceridad. Hoy diríamos falta de voluntad política, falta de compromiso histórico. Nada convence. Todo es criticable siempre encontramos justificaciones para no sentirnos interpelados, para no entrar en esa dinámica de la fraternidad y de la solidaridad. En la dinámica de la esperanza. En la dinámica del compromiso a favor de los demás".
En suma -indicó- para "hacer lo que se nos paga la gana, lo que satisface nuestro egoísmo o favorece nuestro grupo o nuestro partido. Todos, absolutamente todos, creyentes y los que no lo son, apartidistas y militantes de algún partido, el más poderoso y el que se crea necesitado de todo".
Recordó que María y José fueron "migrantes, fueron peregrinos y pudieron encontrar solidaridad efectiva".
En las peticiones se oró por "los gobernantes de todos el mundo, especialmente por los de nuestro país para que sepan interpretar el mensaje de amor y esperanza que el adviento trae a sus conciudadanos".
También se pidió por todos aquellos que "peregrinan durante este día y noche rumbo al santuario de santa María de Guadalupe, para que en su camino sean protegidos por su manto maternal y reciban en su caminar el cuidado de todos nosotros".
Así mismo se elevó una oración por "los pobres, enfermos, ancianos, marginados e inmigrantes en dificultades, especialmente por el grupo de haitianos varados en Tijuana, para que reciban durante este adviento toda la ayuda que necesitan".
Y por "el eterno descanso de Rafael Tovar y de Teresa, secretario de cultura, para que el señor de misericordia lo reciba en su reino y lo premie por sus esfuerzos en bien de la riqueza cultural y artística de nuestro país".