“Sé que ahora hay muchas diferencias que nos dividen, pero tenemos algo en común que trasciende el lenguaje, la ideología, y el origen”, dice la carta del Carta del Jefe del Comando Sur, Craig Faller en parte de su contenido.
Apolinar Martínez/El Político
Precisamente un día antes del 24 de junio, Día Patrio venezolano, el almirante Craig Faller, Comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, envía una sorpresiva carta al ejército venezolano, comunicación que según el propio Almirante “se trata de un gesto “coordinado” de todo el Ejecutivo estadounidense, incluida la Casa Blanca.
Claro que esta misiva es producto de una reflexión profunda de los altos mandos norteamericanos y del Ejecutivo, incluido el presidente Donald Trump, sobre la situación venezolana y la intromisión de Rusia, que ha enviado hasta asesores militares al régimen de Nicolás Maduro y de China.
Por ello la carta, que comienza, con un reconocimiento al esfuerzo del ejército venezolano, concluye con una exhortación a unir esfuerzos para proteger al hemisferio.
“Sus fuerzas armadas han desarrollado un papel indispensable en la gran historia de su país y tienen un rol esencial en el futuro de Venezuela y en la restauración de la esperanza y seguridad de su pueblo. Venezuela necesita a sus fuerzas armadas para enfrentar y derrotar los desafíos futuros; un futuro donde las fuerzas armadas son necesarias para la estabilidad, y el cumplimiento del orden y el progreso”.
La conclusión de la carta es de un profundo contenido filosófico, y es el eje de lo que en definitiva se aspira: unir al ejército de ambos países en el objetivo común de frenar la penetración extranjera.
“Espero que pronto llegue el día en que regresen a la hermandad profesional, y así una vez más trabajar juntos en los retos que enfrentamos en nuestro hemisferio que compartimos”.
Habrá de esperarse la reacción de las fuerzas armadas venezolanas, comprobadamente divididas entre los seguidores de Maduro y quienes esperan el regreso a la institucionalidad democrática.
