Heineken dio a conocer su opinión sobre el recurso de protección que el juez de la Unidad de lo Civil y Administrativo del Guayas en Ecuador concedió a favor de la Cervecería Nacional para dejar sin efecto la decisión mediante la cual la Superintendencia de Control del Poder de Mercado (SCPM) establecía la venta de la marca Club como condición para la fusión de las SABMiller y AB InBev.
“Heineken respalda totalmente la decisión de la SCPM y manifestó su interés de realizar una importante inversión en Ecuador con ocasión de la fusión”, dijo José Javier Jarrín, apoderado de la empresa.
Agregó que “un monopolio así dominante limita el poder de elección de los consumidores, causa precios más altos para el consumidor, baja los márgenes para los distribuidores y tenderos y no promueve mayor empleo para trabajadores ecuatorianos”.
Con información de El Telégrafo
