El vecindario Boystown, en el norte de Chicago (EEUU) fue escenario este sábado de una protesta contra la decisión del Gobierno del presidente Donald Trump de revocar una norma que permitía a los alumnos transexuales usar los baños y vestuarios según el género con el que se identificaban.
Redacción El Político
Según anunciaron esta semana la secretaria de Educación, Betsy DeVos, y el fiscal federal Jeff Sessions, el gobierno dejó sin efecto el decreto al respecto firmado por el expresidente Barack Obama, debido a la confusión que había creado a nivel local por los diversos litigios que enfrentaba en diferentes cortes del país.
"Trump ataca ahora a niños que no se pueden defender", declaró a Efe Maritza Vidal, presidenta de la Coalición Trasnslatina de Chicago, una de las agrupaciones que organizaron la protesta en esta ciudad, reseñó EFE.
Vidal, que cambió su género de hombre a mujer, dijo que la medida de Trump debería ser condenada como una violación a los derechos civiles de lesbianas, gais, bisexuales y personas transgénero (LGBT).
Lo mismo opinó Karari Olvera, también transgénero, para quien la lucha va "más allá del libre acceso a los baños", y se extiende al derecho al empleo y contra la violencia que sufre esta comunidad.
"Este año han sido asesinadas cuatro personas transgénero, una de ellas en Chicago", afirmó.
Entre los participantes en la protesta estuvo el legislador demócrata por Illinois Mike Quigley, quien dijo a Efe que su partido resistirá en el Congreso los intentos republicanos de derogar muchas de las directivas aprobadas por Obama.
"Desafortunadamente somos minoría, y la batalla será difícil", señaló el legislador, quien es fundador del Caucus LGTB y del movimiento para la Igualdad Transgénero.