La Minera Escondida y los dirigentes de los trabajadores en huelga, confirmaron este viernes su asistencia a una reunión conjunta en la Dirección del Trabajo con el fin de seguir allí las negociaciones, pese a que la empresa acusa de hechos de violencia en el acceso al yacimiento en el norte de Chile.
"Una conversación debe darse en un espacio de respeto, que garantice condiciones de legalidad, que hoy, no están dadas", enfatizó la empresa mediante un comunicado difundido hoy, reseña EFE.
Según el vicepresidente de asuntos corporativos de la empresa, Patricio Vilaplana, "no hemos podido realizar los cambios de turno, no sólo porque el camino está bloqueado, sino porque cuando intentamos, nuestro trabajadores fueron amenazados y obligados a retornar a la ciudad".
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El sindicato número 1, que agrupa a 2.500 trabajadores, valoró en un comunicado la instancia de diálogo "con ánimo constructivo" e informó que "ha proporcionado un total de 40 trabajadores para cumplir las labores de emergencia en los turnos, según lo resuelto por los tribunales el día miércoles 16″.
El portavoz de la agrupación sindical, Carlos Allendes, precisó que "un grupo de mineros ha estado controlando el ingreso de personas a las faenas a fin de cerciorarse que no se introduzcan reemplazos ilegales de huelguistas".
La medida de fuerza comenzó tras el fracaso de las gestiones por parte de la Dirección del Trabajo, de Antofagasta, situada a 1.364 kilómetros al norte de Santiago.
El sindicato demanda un aumento salarial del 7 %, mientras la empresa se niega a un incremento en los sueldos y podría recortar algunos beneficios vigentes.
