Muchos pueblos del mundo se han volcado a las calles para rechazar las políticas de regímenes autoritarios como China, Rusia e Irán. Particularmente, este ha sido un año de manifestaciones dramáticas en diversas partes del orbe.
El Político
De acuerdo con Grid, varios de los movimientos de protesta más seguidos se encuentran en momentos críticos.
Agrega que en China, donde a finales del mes pasado estallaron protestas en ciudades de todo el país, desencadenadas por las draconianas medidas contra la coacción, el gobierno dio marcha atrás y está suavizando muchas restricciones, reportó Grid.
Algunos expertos chinos lo consideran una victoria de los manifestantes y una prueba de que el poder popular puede forzar el cambio, incluso en los países más autoritarios, aunque el paso de la política covid cero" dista mucho de la transformación política más fundamental que pedían algunos manifestantes.
¿Por qué es importante?
The New York Times señala que la juventud china protestó contra la dura política de “cero covid” e incluso le pidió a Xi Jinping que dimita.
Esto es algo que no se ha visto en China desde 1989, cuando el Partido Comunista en el poder reprimió con brutalidad a los manifestantes prodemocracia, en su mayoría estudiantes universitarios.
Sin importar qué ocurra en los próximos días y semanas, los jóvenes manifestantes representaron una nueva amenaza para el gobierno de Xi, quien ha eliminado a sus oponentes políticos y reprimido cualquier voz que desafíe su gobierno.
"Tal disidencia pública era inimaginable hasta hace unos días. Estos mismos jóvenes, cuando mencionaban a Xi en internet, utilizaban eufemismos como “X”, “él” o “esa persona”, temiendo incluso pronunciar el nombre del presidente", señaló NYT.
"Soportaron todo lo que el gobierno les impuso: restricciones drásticas contra la pandemia, altas tasas de desempleo, menos libros disponibles para leer, películas para ver y juegos para jugar", refiere el rotativo estadounidense.
Las protestas en Irán
En Irán, donde las protestas contra las leyes discriminatorias y los códigos de vestimenta que afectan a las mujeres llevan sacudiendo las calles desde septiembre, el gobierno ha insinuado algunas concesiones.
Dichas concesiones van desde la disolución de la tan denostada policía de la moralidad hasta la modificación de la ley que obliga a las mujeres a cubrirse el pelo en público.
Pero no está claro si el régimen se toma realmente en serio estas medidas o si los cambios satisfarán a un movimiento que, como dijo un experto a Grid, "ha apuntado al corazón de la República Islámica" más que a un agravio concreto.
No obstante, cerca de 400 manifestantes han sido condenados a penas de prisión, solo en Teherán, por su implicación en las protestas desatadas en Irán por la muerte de la joven kurda de 22 años Mahsa Amini, el pasado 16 de septiembre.
La joven fue detenida tres días antes por la policía de la moral por llevar mal colocado el velo.
El fiscal de la capital iraní, Ali Alqasí Mehr, informó este martes de las penas de prisión contra 400 “alborotadores” —así define a los manifestantes el régimen iraní—, de los cuales 160 han sido condenados a entre 5 y 10 años de cárcel; 80 a entre 2 y 5 cinco años y otros 160 a pasar hasta 2 años entre rejas.
Protestas en Rusia
En Rusia, las protestas públicas que estallaron en respuesta a la invasión de Ucrania en febrero y la orden de movilización masiva del gobierno en otoño parecen haberse calmado.
Sin embargo, Amnistía Internacional denunció que las autoridades rusas han desarrollado un sofisticado sistema de restricciones y duras represalias para aplastar las protestas públicas, que llega a suprimir toda información sobre ellas por parte de periodistas y personal observador independiente.
Esas restricciones han aumentado desde la invasión de Ucrania en febrero de 2022, y la desmesurada represión del movimiento contra la guerra prácticamente impide llevar a cabo cualquier protesta pública o informar sobre ella, según afirma Amnistía Internacional en su informe del mes de noviembre.
Amnistía Internacional (AI) realizó un informe demoledor titulado Rusia: “De todos modos, te vamos a arrestar”. Represalias contra el personal observador y de medios de comunicación que informa desde el lugar de las protestas.
El informe documenta decenas de casos de obstrucción ilegítima del trabajo de periodistas y personal observador durante protestas públicas, tales como detenciones arbitrarias, uso de la fuerza, detenciones y elevadas multas.
Natalia Prilutskaya, investigadora de AI sobre Rusia, declaró que “se puede ver que las autoridades rusas están decididas no sólo a evitar a toda costa y sancionar duramente cualquier protesta, aunque sea pacífica, sino también a minimizar cualquier conciencia ciudadana sobre ellas”.
En conclusión
Estos y otros ejemplos actuales de disidencia pública han suscitado un interrogante: ¿Cuándo y cómo consiguen realmente resultados las protestas contra los gobiernos autoritarios?
El activista e investigador Srdja Popovic explicó que existe un viejo debate sobre "capacidades" frente a "condiciones". Y yo siempre estoy del lado de las habilidades.
Destacó que lo importante es si el movimiento puede construir una estrategia, plantear demandas claras y construir una organización que pueda sostener la opresión.
El experto añade que "esto importa más que las condiciones. Puedes tener todas las mejores condiciones del mundo para el cambio social: un gobierno débil, una economía en crisis, aislamiento internacional, una clase media educada, pero aun así los movimientos pueden fracasar, como hemos visto en lugares como Zimbabue y Venezuela, porque carecen de la habilidad para hacer valer su punto de vista".
Lucha por el cambio medioambiental
En esa línea, dijo que es sólo cuestión de tiempo que la lucha por el cambio medioambiental y por poner un tope a los combustibles fósiles, que ya estamos viendo en organizaciones como Fridays for the Future en Europa, ponga sobre la mesa a los gobiernos occidentales diciendo:
"No se trata solo de que consumas heroína, petróleo y gas, sino que estos productos son comprados a muy malos traficantes: Jamenei y Maduro y el resto". La lista es larga", precisó.
Agrega que "si pueden hacerlo con Rusia, es muy probable que la próxima movilización sea en torno a Venezuela o Irán o la próxima autocracia dependiente del petróleo, así que verás un efecto cascada.
La cuestión es- a su juicio- si los jóvenes serán capaces de conectar el movimiento por la desinversión en combustibles fósiles con a quién se los estamos comprando.
"Esto es más importante para revertir las pérdidas en la democracia mundial que, por ejemplo, cambiar el régimen de Birmania", subrayó.
A sus 20 años, Popovic fue uno de los fundadores de Otpor!, el movimiento estudiantil que desempeñó un papel clave en la organización de las protestas masivas que derrocaron al líder serbio Slobodan Milosevic en 2000.
Posteriormente, fundó el Centro de Estrategias y Acción No Violenta Aplicadas (CANVAS), una organización que ha proporcionado apoyo y formación a activistas prodemocráticos en docenas de países de todo el mundo.