La multinacional Coca–Cola cerró el año 2016 con un beneficio neto de 6.527 millones de dólares, un 11 % menos que el ejercicio anterior, arrastrado por una fuerte caída de sus ganancias en el último trimestre.
El mayor fabricante de refrescos del mundo detalló que entre enero y diciembre pasados registró un beneficio neto por acción de 1,49 dólares, frente los 1,67 dólares por título del año anterior, cuando sus ganancias fueron de 7.351 millones de dólares.
La compañía de Atlanta facturó un total de 41.863 millones de dólares en el conjunto de 2016, lo que supone un 5 % menos que un año antes, cuando sus ventas fueron de 44.294 millones, mientras que sus costes bajaron un 6 %, hasta los 16.465 millones.
En cuanto a los resultados trimestrales, a los que más atención prestaban hoy los analistas, Coca–Cola ganó 550 millones de dólares (13 centavos por título), un 56 % menos que los 1.237 millones del mismo trimestre de 2015 (28 centavos por acción).
Entre octubre y diciembre pasados, la multinacional facturó 9.409 millones de dólares, un descenso del 6 % respecto a los 10.00 millones del mismo periodo del año pasado, mientras que sus costes bajaron un 6 %, hasta 3.794 millones.
"Nuestras ventas en Norteamérica aumentaron un 8 % en el último trimestre y un 4 % en el conjunto del año", dijo al anunciar las cuentas el consejero delegado, Muhtar Kent, quien será sustituido a partir de mayo por James Quincey.
Kent destacó, asimismo, las "acciones estratégicas" adoptadas por la empresa en 2016, incluido el acuerdo "definitivo" en China para refranquiciar sus operaciones de embotellamiento hasta la creación de Coca–Cola European Partners.
Los resultados decepcionaron a los inversores y las acciones de Coca–Cola, una de las treinta que forman parte del índice Dow Jones, bajaba a esta hora un 2,36 % en la Bolsa de Nueva York (NYSE), donde se han depreciado más de un 5 % en los últimos doce meses.
EFE
