Las políticas adelantadas por el gobierno de Gustavo Petro, podrían hacer de la cocaína el principal producto de exportación de Colombia.
El Político
Desde antes de su llegada a la Casa de Nariño, el mandatario se ha mostrado favorable a la legalización del estupefaciente.
Por otro lado, Petro, el primer presidente abiertamente de izquierda en la historia de Colombia, ha prometido una transición energética.
El paso, que a decir del gobernante pretende salvaguardar el medio ambiente, golpea la producción y exportación de hidrocarburos.
En lo que va de 2023, las exportaciones petroleras de la nación andina han registrado una caída de 30%.
En contraposición, la venta de cocaína, allende las fronteras de Colombia, se ha disparado.
Según Felipe González, economista de la agencia Bloomberg, la exportación de la droga generó, a lo largo de 2022, ingresos netos superiores a los 18.000 millones de dólares, apenas 1.000 millones menos que los generados por la exportación de crudo.
El especialista apuntó que, pese a la lucha emprendida por los cuerpos de seguridad del Estado, la indulgencia del Ejecutivo parece favorecer el cultivo de la hoja de coca, insumo primario para la elaboración de la cocaína.
Un reporte de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito reveló que, en el transcurso del pasado año, Colombia registró una cifra récord de 230.000 hectáreas de terreno que fueron utilizadas para sembrar y cosechar hoja de coca.