Complicidad interna y sabotaje son las pistas que manejan los organismos de seguridad israelíes ante un nuevo robo de armas y municiones en un cuartel de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Mario Beroes/El Político
Dicho robo masivo ocurrió en una base militar en los Altos del Golán. Desparecieron más de 70.000 rondas de municiones del parque o armería.
En un comunicado, las FDI confirmaron el robo en la base de Tznobar, cerca de la ciudad israelí de Katzrin, y dijeron que la Policía Militar estaba investigando el asunto.
Faltaban unas 70.000 balas de 5,56 milímetros, del tipo que se usa en los rifles de asalto más utilizados por las FDI, junto con unas 70 granadas diseñadas para ser lanzadas desde un lanzagranadas M-203 montado debajo del cañón de un rifle de asalto.
La agencia de seguridad Shin Bet también estuvo involucrada en la investigación, y la policía ya ha detenido a varios sospechosos. El censor militar prohibió la publicación de más detalles sobre el robo.
No es la primera vez
Durante años, las fuerzas armadas han luchado contra los robos en sus bases, tanto por parte de los soldados, que han robado de todo, desde balas y misiles hasta jeeps del ejército, y por bandas criminales.
El robo del sábado se produjo menos de un mes después de que se robaran unas 30.000 balas de una base en el sur de Israel.
En respuesta a ese robo, un portavoz militar dijo que las FDI estaban trabajando para reducir los robos en las bases mejorando la infraestructura y la seguridad.