La Sala de lo Militar confirmó la sanción de un año de suspensión de empleo a un Cabo primero de la Guardia Civil destinado en la Unidad de Tráfico de Herrera de Pisuerga (Palencia) que accedió a las bases de datos del Instituto Armado para imputar a una persona fallecida en accidente de circulación la responsabilidad de una de las dos multas que le impusieron por conducir a velocidad excesiva -161 km/h- su vehículo habitual, reseña El País
Redacción El Político
La sentencia, según informan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, considera probado que el sancionado, que estaba de baja por enfermedad cuando ocurrieron los hechos, cometió una falta muy grave consistente en el abuso de atribuciones que cause grave daño a los ciudadanos o a la Administración -artículo 7.7 de la LO 12/2007 del régimen disciplinario de la Guardia Civil.
La falta la cometió, explica la sentencia, al utilizar de forma "indebida o abusiva" las facultades que como miembro del Instituto Armado tenía conferidas y que "no le otorgaban un poder omnímodo tanto en la prestación del servicio como en la utilización, dentro o fuera de este, de los medios públicos que se habían puesto a su disposición exclusivamente para desempeñar su trabajo".
El cabo sancionado no pagó dos multas de tráfico por exceso de velocidad que le impusieron el 1 de diciembre de 2008 y el 15 de agosto de 2010, cuando conducía el vehículo que utilizaba habitualmente, cuya titularidad era de su esposa. Tras recibir la notificación de la incoación del expediente sancionador, imputó la responsabilidad derivada de una de dichas infracciones, la cometida a las 12.22 horas del 15 de agosto de 2010 en el kilómetro 175 de la A-66, en sentido León, por circular a 161 km/h, a una persona fallecida en accidente de circulación el 3 de septiembre de dicho año, tal y como él mismo averiguó accediendo de forma indebida a las bases de datos ARENA y SIGO.
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