Corea del Norte confirmó este lunes que las conversaciones diplomáticas con Estados Unidos podrían reanudarse en "pocas semanas", pero que no considerará abandonar sus armas nucleares a menos que se eliminen completamente las amenazas externas, reseñó AP.
El Político
Una declaración atribuida este lunes a un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte detalló que las posibles conversaciones a nivel de trabajo serían decisivas para determinar el destino de la diplomacia del país con Washington. Hizo un llamado a la seguridad no especificada de Estados Unidos y a las concesiones económicas, diciendo que las discusiones sobre la desnuclearización de Corea del Norte sólo serán posibles cuando "las amenazas y los obstáculos que ponen en peligro la seguridad de nuestro sistema y obstruyen nuestro desarrollo sean claramente eliminados más allá de toda duda".
"Que las negociaciones entre la República Popular Democrática de Corea y Estados Unidos sean una ventana al azar o una ocasión para precipitar la crisis depende totalmente de Estados Unidos", especifica la declaración, refiriéndose a Corea del Norte por su nombre oficial, la República Popular Democrática de Corea.
Es importante precisar que las negociaciones se han estancado desde la cumbre de febrero entre el líder norcoreano Kim Jong Un y el presidente Donald Trump en Hanoi, Vietnam, que se derrumbó debido a los desacuerdos sobre el alivio de las sanciones a cambio de medidas de desarme.
Desde entonces, Norcorea ha expresado su descontento a través de la retórica beligerante y de una serie de pruebas de armas de corto alcance que los expertos ven como un intento de aumentar la presión sobre Estados Unidos y Corea del Sur, y aumentar la influencia antes de las conversaciones.
En una reunión con altos cargos este lunes, el presidente surcoreano Moon Jae-in, que presionó duramente para organizar la primera reunión entre Kim y Trump en junio del año pasado, afirmó que las negociaciones a nivel de trabajo entre Washington y Pyongyang se reanudarían "pronto", pero no ofreció detalles específicos, ni siquiera sobre cuándo ni dónde.
Corea del Norte ha cortado prácticamente toda la actividad diplomática con el Sur en medio del estancamiento de las negociaciones nucleares, al tiempo que exige que Seúl se separe de Washington y reinicie los proyectos económicos intercoreanos frenados por las sanciones dirigidas por Estados Unidos contra el Norte.
"Nuestro gobierno servirá cualquier papel y hará todo lo que pueda para estabilizar la paz en la Península Coreana", dijo Moon.
Cabe acotar que el lunes pasado, el Primer Viceministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Choe Son Hui, aseveró que el Norte está dispuesto a reanudar la diplomacia nuclear a finales de septiembre, pero que Washington debe llegar a la mesa de negociaciones con nuevas propuestas aceptables. Dijo que si las propuestas no satisfacen a Corea del Norte, las negociaciones entre los dos países podrían terminar.
La oferta de Choe para las conversaciones llegó horas antes de que Kim supervisara una prueba de fuego de lo que los medios de comunicación estatales han descrito como un sistema de lanzamiento de cohetes múltiples "supergrande". Fue uno de los cuatro nuevos sistemas de armas de corto alcance que el Norte reveló en las últimas semanas y que, según los expertos, podría ampliar potencialmente la capacidad del país para atacar objetivos en toda Corea del Sur, incluidas las bases de Estados Unidos allí, concluye AP.
Fuente: AP