Joselit Ramírez, el Superintendente Nacional de Criptoactivos (SUNACRIP) de Venezuela, forma parte del grupo de 14 funcionarios solicitados en Estados Unidos por formar parte del Cartel de los Soles-FARC y llevar a cabo diversas tareas de movilización física y de lavado de activos provenientes de la venta de cocaína, para Nicolás Maduro,
El Político
Otro trabajo revelador trabajo de Primer Informe, reportó que en primera instancia Ramírez estaría relacionado con la coordinación y gestión de vuelos privados durante a campaña presidencial de Maduro en 2018, para evadir las sanciones impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC por sus siglas en inglés), pero también pende sobre él la acusación del uso de criptomonedas para ocultar ganancias de transacciones relacionadas con el tráfico ilícito de drogas.
El comunicado del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, menciona que «desde febrero del 2017 hasta marzo del 2019, El Aissami Maddah y Ramírez Camacho Camacho trabajaron con personas estadounidenses y entidades con sede en EEUU para proporcionar servicios de vuelos privados en beneficio de la campaña presidencial de Maduro en 2018, en violación de las sanciones de la OFAC dirigidas a Maduro y después organizar elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente dirigida por Cabello Rondón».
La referencia a El Aissami en esta parte de la acusación refleja la tutela a la que siempre ha respondido Ramírez, cuya carrera en la revolución ha tomado vuelo gracias al impulso del sirio, quien lo incorporó a su equipo de confianza cuando éste era gobernador del estado Aragua, nombrándolo Secretario del Despacho y Director de la Oficina de Atención al Ciudadano, luego fungió como Director General de la Vicepresidencia de la República cuando El Aissami ocupó ese cargo, hasta junio del 2018 cuando asume en SUNACRIP, pocas semanas antes de que Maduro anunciara la aparición del Petro, especie de moneda virtual o criptomoneda manejada por el gobierno socialista venezolano.
La operación
A fines de febrero de este año, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos, reveló la existencia de un Programa de Inteligencia de Criptomonedas (CIP), desarrollado por el Centro de Contrabando de dinero en Efectivo del ICE (BCSC).
Según consta en documentos del ICE, «el BCSC ha desarrollado un Programa de Inteligencia de Criptomonedas (CIP) que identifica los negocios de servicios monetarios sin licencia en la forma de uso por parte de los corredores de criptomonedas independientes de sitios entre pares (P2P), foros en línea y anuncios clasificados, y mercados de la darknet (DNM) para participar en la actividad de negocios de servicios monetarios sin licencia (MSB)».
Este Programa afirma que gran parte de los MSB sin licencia que operan con criptografía en los mercados de la darknet y los mercados P2P se dedican al blanqueo del producto de los estupefacientes.
El organismo dice haber aumentado su capacidad para lograr «investigaciones cibernéticas dirigidas a los mercados ilícitos de la darknet, en los que se suele vender fentanil y percursores químicos».
Los primeros grandes logros de este equipo se presentaron en 2017 cuando se asociaron con la DEA para llevar a cabo una investigación a nivel nacional de un año de duración sobre los vendedores en la darknet, que condujo a más de 35 detenciones. El ICE también ejecutó una acción coordinada internacionalmente de una semana de duración durante Octubre del 2016.
Con todo este equipo detrás de los criptoactivos que mueven los carteles de la droga en Venezuela y Colombia, el Distrito Sur de Nueva York acusó a Joselit Ramírez como cabeza de operaciones que habrían logrado lavar dinero para el Cartel de los Soles.
Según documentos judiciales, Ramírez Camacho ordenó a una persona de origen estadounidense que abriera una cuenta bancaria en Estambul, Turquía, la cual serviría en un plan para lavar el producto de la actividad del narcotráfico y evadir las sanciones de la OFAC.
Alysa Erichs, Directora Ejecutiva Asociada de Investigaciones de Seguridad Nacional de ICE explicó en el comunicado de prensa del Departamento de Justicia que «el alcance global y el compromiso de este programa para identificar, atacar e investigar agresivamente a las personas que violan las leyes de EE.UU, explotan los sistemas financieros y se esconden detrás de la criptomoneda para promover su actividad criminal ilícita. Que esta acusación sea un recordatorio de que nadie está por encima de la ley, ni siquiera funcionarios políticos poderosos».
El Fiscal General estadounidense, William P. Barr dijo sobre éste punto que «Estados Unidos no permitirá que estas autoridades venezolanas corruptas utilicen el sistema bancario estadounidense para transferir sus ganancias ilícitas de América del Sur o para promover sus planes criminales».
Aunque la declaración no aclara cuáles criptomonedas habría usado Joselit Ramírez para lavar dólares del narcotráfico, es ampliamente conocido que el gobierno venezolano mantiene sus criptomonedas respaldadas por petróleo a través del Petro, proyecto que Maduro y los suyos han intentado masificar, sin embargo el uso de esta criptomoneda por parte de ciudadanos venezolanos, es muy limitado, al punto de que al día de hoy no se conoce el precio del Petro, moneda digital que, hoy se sabe, fue usada por el gobierno madurista para evitar las sanciones estadounidenses y mover el dinero proveniente del narcotráfico.
Reportaje de Primer Informe