Energía, alimentación, salud, transporte y hasta el espacio. Todos estos fueron los negocios con los que Rusia está dispuesta a colaborar con Venezuela.
El Político
Rusia cree que los negocios bilaterales con Venezuela están por debajo de su potencial. Que las sanciones de Estados Unidos contra ambos países están complicando una relación que podría ser mucho más fructífera.
“Venezuela es un socio estratégico de comercio exterior de Rusia en la región latinoamericana. Al mismo tiempo, el nivel actual de comercio bilateral no se corresponde con el potencial de las economías de nuestros países”, afirmó el viceprimer ministro ruso, Yuri Borisov a Al Navío.
“Es muy importante que, en estas difíciles condiciones, encontremos la oportunidad de reunirnos, y lo que es especialmente agradable, en formato presencial. La reunión de hoy nos permitió comparar posiciones sobre los temas más urgentes de la cooperación comercial y económica”, agregó, anunciando que en el segundo semestre del año esperan otra reunión con sus pares venezolanos.
Sin duda el asunto prioritario fue el energético. Los acuerdos de Moscú y empresas rusas con la estatal Petróleos de Venezuela “son la base tradicional de nuestra cooperación económica bilateral”, dijo el propio Borisov. Eso sí, sin aportar más detalles.
Negocios de exploración espacial
Rusia cree que la relación aeroespacial con Venezuela tiene potencial, no para descubrir el universo, sino para mejorar la cotidianidad de los venezolanos. ¿Cómo? Mejorando “la teledetección terrestre, las telecomunicaciones por satélite, las comunicaciones y mucho más”, explicó Borisov.
“Observamos con satisfacción que el primer paso serio hacia la ejecución práctica de proyectos en un ámbito de alta tecnología tan importante como el uso pacífico del espacio ultraterrestre se dio en el marco de la reunión de hoy. La firma de un acuerdo intergubernamental de cooperación en la exploración y el uso del espacio ultraterrestre con fines pacíficos permitirá a nuestros países crear la base necesaria para el desarrollo de una cooperación mutuamente beneficiosa”, añadió.
Resolver problemas “sociales y económicos urgentes” y de salud
Para los rusos, “un área separada y primordial” en la cooperación con Venezuela es el coronavirus. Pero quieren ir más allá en el tema sanitario.
“Rusia continúa ayudando a nuestros amigos venezolanos a resolver problemas sociales y económicos urgentes. Me gustaría señalar especialmente que en este momento en las relaciones comerciales ruso-venezolanas prevalecen bienes de importancia social, a saber, productos farmacéuticos y trigo”, apuntó Borisov, recordando los suministros de la vacuna contra la gripe rusa Flu-M, la insulina de la compañía Geropharm, así como el medicamento anticonvulsivo Avifavir.
Negocios con las vacunas
El viceprimer ministro de Rusia recordó que hicieron tres envíos de ayuda humanitaria a Venezuela para combatir la pandemia. Estos se produjeron entre marzo y agosto de 2020. Apuntó que suministraron 70.000 pruebas de diagnóstico PCR, que “en ese momento eran sumamente escasas”.
Respecto a la vacuna Sputnik V, Borisov dijo que Rusia ayudará a Venezuela a iniciar una campaña masiva de vacunación en cuanto resuelvan el tema interno.
“La parte rusa está trabajando para darle el ritmo necesario a la vacuna Sputnik V. Estamos tratando de encontrar recursos para cumplir con los acuerdos y ayudar a nuestros socios estratégicos, que es Venezuela, dado que hay una campaña para vacunar a la población en Rusia, y nosotros somos los primeros. Estamos esforzándonos por brindar vacunas a los rusos”, dijo.
Borisov también elogió que Venezuela fuera el primer país de Latinoamérica en registrar la Sputnik V.
“Es simbólico que Venezuela se haya convertido en el primer país de América Latina en registrar la vacuna rusa Sputnik V en su territorio y unirse a sus ensayos clínicos. Consideramos esto como una confirmación de la naturaleza estratégica de las relaciones ruso-venezolanas”, apuntó.
Rusia producirá insulina en Venezuela
Otro punto llamativo fue el pacto sellado por el gobierno venezolano y la empresa rusa Geropharm. Un acuerdo de cooperación a largo plazo, entre 2021 y 2026, que implica “la producción de preparados de insulina en Venezuela”.
Según el documento que firmó Borisov con Delcy Rodríguez, la producción de insulina se desplegará en Venezuela en el laboratorio Espromed Bio.
Restaurando vuelos Rusia-Venezuela
Otro de los temas que trató Rusia con los vicepresidentes Tareck El-Aisammi y Delcy Rodríguez fue la conexión aérea Moscú-Caracas a través de la estatal venezolana Conviasa. Aerolínea que, cabe recordar, abrió una oficina comercial en la capital rusa el pasado viernes.
“Todos los documentos necesarios para obtener un permiso para operar vuelos han sido proporcionados por la aerolínea venezolana”, recordó Borisov.
Negocios con la venta de trigo
Por último, Borisov recordó que, de 2017 en adelante, Rusia ha entregado a Venezuela alrededor de 700.000 toneladas de trigo.
“Rusia está dispuesta a seguir suministrando trigo a Venezuela si es necesario”, señaló.