Cuatro años y medio de prisión para el asaltante del Congreso que fue fotografiado con los pies encima del escritorio de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
El Político
Los fiscales federales habían pedido al juez que sentenciara a Richard “Bigo” Barnett, residente de Arkansas, a más de siete años por sus acciones antes, durante y después de la violencia del 6 de enero de 2021 en el Congreso de Estados Unidos, reportó El País.
Panorama general
Los fiscales señalaron que la imagen de Barnett sonriente en la oficina de la congresista demócrata se convirtió en “una de las imágenes más conocidas de ese día, de asalto al Congreso".
Además, de "un símbolo de que los asaltantes arrebataron el control tanto de un espacio sagrado como de un proceso político a los líderes electos de la nación".
Los abogados de Barnett habían argumentado que su cliente no debía pasar más de seis meses tras las rejas.
54 meses de prisión para asaltante del Congreso
“El Sr. Barnett es un bombero y jinete de toros jubilado de 63 años de una zona rural en Arkansas que visitó D.C. por primera vez para protestar pacíficamente y, por infortunio, se vio envuelto en los eventos que convirtieron un miércoles común en lo que siempre se conocerá como ‘e 6 de enero’”, sostuvieron sus abogados.
Pero el juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos Christopher Cooper no estuvo de acuerdo y lo condenó a 54 meses de prisión.
Barnett fue acusado en enero de ocho cargos derivados del ataque al Congreso, incluido el robo de propiedad del Gobierno—se llevó un documento de la oficina de Pelosi— y el ingreso en un edificio o terreno restringido portando un arma mortal o peligrosa. Además de un dispositivo paralizante, Barnett entró al Capitolio armado con un bate de acero de diez libras, dijeron los fiscales.
Entre líneas
Barnett, quien se convirtió en un símbolo ampliamente conocido de los disturbios, reconoció haber dejado lo que luego llamó una “nota desagradable” para Pelosi.
Decía: “Nancy, Bigo estuvo aquí”, y terminaba con una palabra obscena y sexista para referirse a la congresista.
Barnett expresó remordimiento por sus acciones cuando subió al banquillo de los testigos en su propia defensa. “No debería haber puesto los pies sobre el escritorio”, dijo al jurado. “En ese momento pensé que era divertido”, dijo, pero después de reflexionar, le pareció “grosero”.
Importancia del asalto al Congreso
Los fiscales dijeron en respuesta que “Barnett era consciente de la importancia del 6 de enero de 2021. Creía que los comunistas se apoderarían de Estados Unidos si el presidente electo, Biden, se convertía en presidente y estaba preparado para hacer ‘lo que fuera necesario’ (como dijo en las redes sociales), incluida la ocupación del Capitolio, para evitarlo”.
Después de su arresto, “Barnett buscó sacar provecho de su notoriedad y conducta criminal”, incluso vendiendo fotografías suyas autografiadas donde se le ve en la oficina de Pelosi, dijeron los fiscales. Y agregaron que siguió tuiteando “desinformación” y teorías de conspiración sobre el asato al Congreso tras ser acusado.
Los fiscales dijeron que estas acciones demuestran que “no tiene remordimiento y estaría dispuesto a participar en una conducta similar en el futuro”.