Más de medio centenar de migrantes cubanos permanecen detenidos en Islas Cayman, según informes del gobierno de ese país. Solo pueden quedarse allí si reciben asilo político.
Un grupo de cubanos retenidos en Cayman Brac, Islas Cayman, tras abandonar Cuba por el sur de la provincia Granma, aseguran que tienen pocas posibilidades de obtener asilo polِítico, la única opción posible para permanecer legalmente en ese país.
El derecho internacional prohíbe a las Islas Cayman facilitar la migración ilegal, y por ello la población no puede ayudar a los migrantes, ya sea en tierra o en el mar, proveerles alimentación, vivienda, transporte u otros tipos de ayuda. Quienes violen esta ley son penalizados con multas y sanciones de hasta siete años de prisión según un informe de funcionarios de inmigración de Isla Cayman.
“Se nos averió el barco en que veníamos y tuvimos que quedarnos aquí”, explicó a Martí Noticias Juan Alberto Oliva, quien forma parte de un grupo de 21 cubanos que abandonó la isla el 26 de mayo por el sur de la provincia cubana de Granma, a bordo de una precaria embarcación, con la intención de llegar a Estados Unidos.
De ese grupo, 14 regresaron a la isla y siete permanecen presos en Cayman, a la espera de conseguir asilo político para poder quedarse allí, junto a otros 70 cubanos en igual condición, dijo Oliva.
“Yo estoy a la espera para pedir asilo político, pero no albergo muchas esperanzas porque “es muy difícil obtenerlo”, dijo el hombre, que asegura haber abandonado Cuba porque formaba parte del grupo opositor de Pastores por el Cambio, y fue acosado por las autoridades.
En Cayman Brac también permanece detenido otro grupo de unas 70 personas, pero Oliva dijo que desconoce la situación de ellos, porque cada cual mantiene privacidad y discreción.
Yanet Orozco es una de las ocho mujeres que permanecen en el centro de detención, y accedió a conversar con Martí Noticias sobre su situación.
Dijo que permanece en ese dentro de detención de Emigración en Cayman Brac desde hace ocho meses, y tanto ella como el resto de los migrantes reciben poca información de lo que ocurre fuera de allí.
“Estamos muy custodiados, y no nos dejan salir de aquí, ni tenemos acceso a Internet para buscar información, solo recibimos visita religiosa que nos trae la palabra de Dios, y podemos ver la televisión pero es en inglés”, detalló la mujer.
Orozco desconoce cuál será su destino en los próximos meses, y teme que la deporten a Cuba.
Igual temor siente Leonardo Rosales Reyes, otro de los cubanos que espera por el asilo político en Cayman Brac, y que asegura haber pertenecido a la organización opositora Cuba Independiente y Democrática.
Rosales dijo que fue acosado en Cuba, pero apenas ha podido explicar su caso ante las autoridades locales para pedir asilo político, y tampoco alberga muchas esperanzas de que se lo otorguen. Dijo que amigos de su organización fuera de la isla están al tanto de su caso.
Un reporte del Gobierno de Islas Cayman dio a conocer recientemente que en el pasado mes de septiembre, 15 migrantes fueron repatriados a La Habana, mientras que otros 73 cubanos permanecían en custodia de las autoridades de Inmigración.
Un memorando de entendimiento firmado en 1999, y actualizado en 2015, entre los Gobiernos de Islas Cayman y Cuba, establece que a los migrantes cubanos que entran en las aguas jurisdiccionales de estas islas no se les puede dar ayuda alguna, y los que logren tocar tierra deben ser repatriados a Cuba.
Las Islas Cayman están situadas en la zona occidental del mar Caribe; unos 240 kilómetros al sur de Cuba. Su capital es George Town, el idioma oficial es el inglés y se les considera un territorio británico de ultramar dependiente del Reino Unido.
Con información de Martí Noticias