México se ha convertido en la principal opción de permanencia para los cubanos que tenían planes de ingresar a Estados Unidos, pero se vieron afectados por la cancelación de la política de "Pies secos, pies mojados". Tal es el caso de Alexander, quien llegó a Ciudad de México para viajar de allí a Miami y reunirse así con su familia.
Alexander vendió su casa y todo su patrimonio en la isla, se encuentra en la zozobra, ya que no sabe si podrá reunirse con su esposa y sus hijos, además de no querer regresar a Cuba. Expuso que está en incertidumbre porque nadie sabe lo que va pasar con los cubanos que están en la frontera o viajando.
El cubano aseguro que al igual que él otros de sus paisanos, quienes son asesorados por la Asociación Cívica Cubano-Mexicana AC., no buscarán llegar a la frontera norte de México ante el temor de ser deportados a Cuba, por lo que esperarán la determinación de Donald Trump sobre si elimina sus privilegios migratorios.
Su temor aumenta debido a que aseguró tener familiares presos en Cuba por dedicarse a actividades en contra del régimen castrista. Aunado a esto teme que en México no logré obtener apoyo como refugiado político mientras Trump determina si continúa con la decisión de Barak Obama.
Por su parte, el presidente de la Asociación Cívica Cubano-Mexicana AC., Eduardo Matías López, consideró la decisión del presidente Obama como una venganza a los isleños por el voto de Florida en favor de Donald Trump.
El activista enfatizó que la relación que buscaba Obama con el presidente de Cuba, Raúl Castro, no tenía que ver con los derechos humanos y políticos del pueblo cubano.
De acuerdo a la Asociación Cívica Cubano-Mexicana 800 cubanos arribaron al país y buscaban llegar a Estados Unidos antes del anuncio del fin del asilo político estadunidense. Actualmente, los cubanos se encuentran en Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Campeche.
Con información de El Excelsior