A poco más de 10 meses de asumido el gobierno de Mauricio Macri en Argentina y de la flexibilización de medidas que afectaban las importaciones, todavía no se observan mejoras en las exportaciones uruguayas hacia ese país. Además, nuevas resoluciones vuelven a afectar las ventas hacia ese mercado.
Entre enero y octubre las exportaciones hacia Argentina cayeron 7,8% en comparación con el mismo período de 2015. Las ventas fueron por $ 304 millones, frente a $ 330 millones, según información del Instituto Uruguay XXI.
El organismo oficial indicó que en esos meses los tres principales rubros exportados a Argentina fueron las autopartes, el papel y cartón y las pinturas y barnices. En el primer caso, las ventas se mantuvieron estables con un aumento mínimo de 0,8%. Sin embargo, en el segundo caso la caída fue de 48,1% y en el tercero de 18,5%.
A su vez, en octubre las colocaciones disminuyeron 14,5% en comparación con igual mes de 2015.
El año pasado, la Organización Mundial del Comercio (OMC) solicitó al gobierno de Cristina Fernández que en diciembre dejara de exigir las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI), principal traba impuesta por la administración kirchnerista.
A pocos días de asumir, Macri derogó las DJAI, aunque mantuvo el régimen de licencias automáticas y no automáticas de importación.
En primera instancia, la medida del nuevo gobierno fue bien recibida por los exportadores uruguayos. Pero, en los primeros 10 meses del año, las exportaciones hacia Argentina siguen en caída, más allá de esa flexibilización.
Por otra parte, el viernes 21 de octubre, la Secretaría de Comercio argentina introdujo modificaciones al régimen de licencias no automáticas. Esas licencias, a pesar de no ser igual a las DJAI, exigen a los compradores una serie de requisitos y trámites. Eso genera demoras e incertidumbre ya que la autorización de la importación puede retrasarse.
El vicepresidente de la comisión de Comercio Exterior de la Cámara de Industrias (CIU), Washington Durán, dijo a El País que "buena parte de los exportadores a Argentina perdieron el mercado y recuperarlo no es fácil. No es en un año que se retoman los clientes. Algunas empresas (que exportaban) quedaron muy debilitadas o directamente tuvieron que cerrar. Va a tomar un tiempo recuperar el comercio con Argentina".
El industrial sostuvo que con las licencias no automáticas de importación se siguen aplicando restricciones.
"Son medidas similares a las que se tomaban. Cambió la forma, el trato, pero las dificultades siguen estando. Entre otras cosas, porque Argentina todavía no logra recuperarse. Las señales políticas fueron muy buenas, al principio vimos con buenos ojos toda la apertura que había, pero no se tradujo en un efecto real cambiando las condiciones de comercio, para nada. Eso sigue trancado", indicó Durán.
Informó que algunas de las nuevas posiciones arancelarias incluidas en el régimen de licencias no automáticas corresponden a productos de exportación de Uruguay. Durán expresó que la tramitación de esas licencias generan incertidumbre, ya que "nunca se sabe cuánto van a demorar".
Además, sostuvo que Argentina no está cumpliendo con el plazo de 30 días que la OMC establece como máximo para autorizar la importación. "Ellos dicen que son 60 días, pero no es así, son 30. Pero aparte tampoco cumplen con los 60; es imprevisible", afirmó el directivo de la CIU.
Los productos de plástico son los artículos más afectados por el nuevo listado de licencias no automáticas.
Por su parte, la presidenta de la Asociación Uruguaya de Industrias del Plástico (AUIP), Esperanza Romariz, dijo a El País que más allá de las licencias, Argentina aplica controles en el ingreso de productos plásticos que, sin embargo, Uruguay no los hace con las importaciones.
"Cada vez exportamos menos y cuando lo hacemos los países vecinos nos aplican determinados controles, que está bien que los hagan, mientras que en Uruguay hay cero control", afirmó. Romariz.
"Hay decretos dentro del Mercosur. Por ejemplo, los envases de plástico que puedan contener alimentos requieren de ciertos controles. En el caso de Argentina el fabricante tiene que estar declarado en el Instituto Nacional de Alimentación (INAL). Hay controles al producto y al color, porque como los colores llevan pigmentos pueden ser tóxicos. Acá no se hace absolutamente nada y tampoco hay interés de hacerlo. Entonces, es una competencia muy desleal en tu propio país,", expresó la empresaria.
Expectativa.
Con el escenario actual, los industriales no son muy optimistas en conseguir un repunte de las exportaciones hacia Argentina. Durán indicó que la perspectiva es que mientras la economía argentina no empiece a recuperarse y no lleguen inversiones, van a seguir con las restricciones.
El empresario sostuvo que en los supermercados de Buenos Aires no se ven en las góndolas productos importados como ocurre en Uruguay.
"El costo de vida está muy alto en Argentina y si no pusieran estas restricciones al comercio estoy seguro que el volumen de importaciones de productos de consumo sería mucho mayor", explicó.
Marca "Uruguay Logístico".
El gobierno lanzó ayer la nueva marca "Uruguay Logístico" para promocionar ese rubro en el exterior y ser atractivo para empresarios e inversores. Dicha marca se suma a "Uruguay Natural" y pasará a funcionar como una apuesta al "desarrollo logístico" que puede ofrecer el país, gracias a su ubicación geográfica, según manifestó en su presentación el ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi.
"Esto apunta a una identidad que tiene que ver con la preocupación por organizarnos en el funcionamiento interno, en el desarrollo de la logística como país, pero también de proyectarnos hacia el mundo y ofrecer algunas de nuestras ventajas competitivas", añadió. La marca país comenzará a ser otorgada a empresas, productos y servicios en 2017.