Agentes de la Policía de Papúa Nueva Guinea presuntamente agredieron físicamente y detuvieron a dos solicitantes de asilo iraníes durante las celebraciones del año nuevo, informaron hoy medios locales.
La Coalición de Acción por los Refugiados divulgó fotografías de los dos inmigrantes con cortes y moratones en el rostro, quienes se cree sufrieron varias fracturas a raíz del incidente aún no esclarecido, según la cadena local ABC.
El ministro australiano de Inmigración, Peter Dutton, acusó a los activistas de usar este incidente para atacar a la política de inmigración de Australia, que incluye la tramitación de las solicitudes de asilo en los centros de la isla papú Manus, declarado ilegal por el Supremo de ese país, y la nación insular de Nauru.
"Si ha habido una interacción con la policía de Papúa en la Nochevieja habría que esperar a que se conozcan todos los hechos de ese caso antes de emitir cualquier comentario que diga que ellos fueron víctimas por el hecho de ser refugiados o por ser parte de la población de la isla Manus", comentó Dutton a la emisora 2GB.
El Ejecutivo de Camberra asegura que la investigación del incidente es competencia de la Policía papú, pero los activistas consideran que este tipo de incidentes forman parte de un maltrato sistemático que sufren los inmigrantes indocumentados en los centros que tiene Australia en el Pacífico Sur.
El portavoz de la Coalición de Acción por los Refugiados, Ian Rintoul, pidió al Ejecutivo de Camberra que "supervise el papel y la actitud de la Policía de Papúa Nueva Guinea" porque "en última instancia es responsable por toda la gente que está detenida en la isla", según citó ABC.
La supuesta agresión policial se da después de la muerte de un solicitante de asilo sudanés que colapsó en el centro de Manus poco antes de la Navidad.
La ONU y grupos de defensa de los derechos humanos han criticado reiteradamente la existencia de estos centros de detención y califican como "inhumanas" las precarias condiciones de vida a las que se somete a los internos.
Muchos de los inmigrantes retenidos en Nauru y Papúa Nueva Guinea han huido de conflictos como los de Afganistán, Darfur, Pakistán, Somalia y Siria, y otros que han escapado de la discriminación o de la condición de apátridas como las minorías rohinyá de Birmania, o Bidún, de la región del Golfo.
Son detenidos antes de llegar a las costas australianas y enviados a los centros gestionados por Australia en Manus y Papúa para procesar su estatus de refugiados.
Con información de EFE