El hombre que el sábado arrolló con su coche a un grupo de viandantes en una zona peatonal de Heidelberg (oeste de Alemania) y mató a una persona guardó hoy silencio en el primer interrogatorio de la policía, que investiga sus motivos y descarta un ataque terrorista o con connotaciones políticas.
La Fiscalía de Heidelberg y la Policía de Mannheim informaron en un comunicado conjunto que se ha decretado orden de prisión para el hombre, un estudiante alemán de 35 años sin antecedentes penales, como sospechoso de homicidio, tres intentos de homicidio y lesiones.
El hombre, que fue herido de bala en el estómago durante su detención tras huir con un cuchillo del lugar del atropello, ha sido operado y se encuentra fuera de peligro.
Los investigadores han determinado que alquiló el coche hace dos semanas en Heidelberg, donde reside, y analizan si en el momento del atropello era responsable de sus actos.
"Según el estado actual de las investigaciones no hay ningún indicio que apunte a un trasfondo terrorista o extremista", manifestaron las autoridades para disipar temores y evitar paralelismos con el atentado yihadista de diciembre en Berlín, en el que murieron doce personas después de que un camión arrollara a los visitantes de un mercadillo navideño.
De acuerdo con el relato policial, el hombre irrumpió con su coche en una zona peatonal de la plaza de Bismarck, cercana al casco antiguo, y dirigió el vehículo a un grupo que se encontraba frente a una panadería.
Una persona consiguió evitar el coche dando un salto, pero otras tres resultaron heridas.
Un hombre de 73 años fue trasladado al hospital herido grave y murió a las pocas horas, mientras que un austríaco de 32 años y una mujer de 29 y natural de Bosnia Herzegovina, fueron atendidos en el lugar de los hechos por los servicios de emergencia y no necesitaron ser ingresados.
Después del atropello, el hombre se alejó blandiendo un cuchillo de cocina.
Los agentes lo localizaron en las cercanías y le instaron a tirar el cuchillo, pero el agresor intentó atacarlos; tras usar gas pimienta para intentar reducirlo, un policía le disparo, explicaron las autoridades en su comunicado.
El hombre permanece vigilado en una clínica de Heidelberg a la espera de que pueda ser trasladado al hospital de la cárcel.
EFE