El fiscal anticorrupción español, Manuel Moix, anunció su dimisión al cargo tras la polémica suscitada por el hecho de que tiene, junto a sus hermanos, una empresa radicada en Panamá, con ventajas fiscales.
El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, anunció la renuncia de Moix, a petición propia, a pesar de que dijo no ver en él una conducta incorrecta.
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Moix, que accedió al puesto en febrero pasado, ya había generado otras polémicas por decisiones como la de retirar a determinados fiscales de algunos casos de corrupción e incluso algunos de sus subordinados se rebelaron contra él por considerar que obstaculizaba su trabajo.
El diario digital Infolibre reveló el lunes pasado que Moix tiene junto a tres hermanos una empresa con ventajas fiscales en Panamá que es propietaria de una vivienda en España valorada en algo más de medio millón de euros (unos 600.000 dólares).
El caso ha suscitado una gran polémica en España, dado que la oposición política al Gobierno del PP (centroderecha) y numerosos compañeros de la Magistratura ven incompatible desde el punto de vista ético y moral que Moix tenga esa empresa "offshore" y, al mismo tiempo, persiga desde la Fiscalía comportamientos delictivos e irregulares.
Además, algunos de sus subordinados se enfrentaron a él en una reunión al considerar que Moix intentaba obstaculizar una investigación sobre corrupción al expresidente regional de Madrid Ignacio González, quien en las escuchas policiales mostraba una buena opinión del fiscal.
La oposición había pedido la comparecencia de Moix y del ministro de Justicia en el Parlamento para dar explicaciones.
El Gobierno, que en estos meses ha defendido la actitud de Moix en todas las polémicas en las que se ha visto rodeado, ha tomado distancia sin embargo en este caso.
Todavía hoy Moix fue defendido por su superior jerárquico, el Fiscal General del Estado con el argumento de que "no existen motivos para su cese".
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A juicio de José Manuel Maza no ha existido en el comportamiento de Moix "ninguna clase de ilegalidad o irregularidad, ni siquiera incompatibilidad", aunque ha aceptado la renuncia del fiscal anticorrupción.
Moix, que no ha hablado aún, dijo en días anteriores que no había ilegalidad alguna en tener con sus hermanos una empresa radicada en Panamá y aseguró que era una herencia de sus padres.
EFE
