Al menos 38 personas murieron y otras 40 resultaron heridas, varias de ellas de gravedad, en un doble atentado suicida talibán contra autobuses de la Policía afgana , en los que viajaban jóvenes cadentes,  en las afueras de Kabul, informaron fuentes oficiales.
Fuerzas de seguridad afganas inspeccionan el lugar de los atentados, en Kabul. / AFP
Un primer atacante detonó los explosivos que llevaba en su vehículo contra dos autobuses en los viajaban cadetes policiales y apenas cinco minutos más tarde un segundo insurgente a pie se inmoló en la misma zona, indicó el gobernador del distrito de Paghman, donde se produjo la acción, Musa Rahmati.
Mirá también: Matan en Afganistán a un reconocido periodista
El lugar, en las afueras de la capital, fue cerrado por las numerosas fuerzas de policía para permitir la llegada de las ambulancias.
El pasado 20 de junio, al menos 25 personas, 14 de ellas empleados de seguridad nepalíes, murieron en tres atentados casi simultáneos en Kabul y en el noreste de Afganistán.
Mirá también: Con nuevo jefe, los talibán salen a la caza de funcionarios en Afganistán y ejecutan a 16
En el lugar del atentado de este jueves, el jefe de la policía de Kabul Abdul Rahman Rahimi afirmó que se trata de ataques suicidas que alcanzaron un autobús. Un camarógrafo de la AFP vio sin embargo al menos tres vehículos verde oscuro destrozados por la onda expansiva.
Foto: AP
"El ataque de martirio iba dirigido contra dos autobuses de reclutas de la policía en Kabul, muchos resultaron muertos y heridos", dijo un portavoz de los insurgentes, Zabihulá Mujahid, en un comunicado. En un mensaje posterior, dos horas más tarde, el mismo portavoz habló sin embargo de "dos ataques" que causaron "al menos 150 muertos".
Mirá también: Los talibán ya tienen nuevo líder
Varios testigos afirman que las explosiones fueron seguidas. Una primera detonación fue rápidamente seguida por otra, cuando la gente se acercaba a prestar ayuda a las víctimas, según la embajada de Estados Unidos en Kabul, que denunció un ataque "horrible".
Foto: AFP
El autobús transportaba a reclutas a la academia de la policía de Wardak, al oeste de la capital afgana, informaron las fuerzas de seguridad.
Los rebeldes islamistas, que exigen la salida de todas las tropas extranjeras en Afganistán, no paran de ganar terreno desde el inicio de la retirada de las fuerzas de la OTAN.
Principalmente, consiguen progresar en el sur y el este del país, pero también en las provincias del norte.
Foto: Reuters
Más de 5.000 miembros de las fuerzas de seguridad afganas murieron en 2015 y ese mismo año hubo más de 11.000 víctimas civiles, entre ellas 3.550 muertos, una cifra récord, según datos de Naciones Unidas.
Ante esta situación, el presidente Barack Obama decidió a principios de junio frenar la retirada de las tropas estadounidenses.
Foto: Reuters
Está previsto que un contingente de 9.800 estadounidenses siga en Afganistán este año y que se reduzca a 5.500 hombres en enero de 2017, dentro de la operación impulsada por la OTAN "Resolute Support" que cuenta con un total de 10.000 hombres.
Las fuerzas estadounidenses, que apoyan a las fuerzas especiales afganas, podrán a partir de ahora dar también apoyo al ejército regular con aviación y una misión de "acompañamiento y consejo en tierra y aire", explicaron desde Washington.
Fuente: agencias
Con Información de: El Clarín
