Donald Trump anunció el lunes que bajo un posible nuevo acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán, no se permitirá ningún enriquecimiento de uranio. Esta postura fue expresada por el presidente de Estados Unidos a través de su red social, Truth Social, luego de que el medio Axios reportara que una oferta de Washington podría permitir el enriquecimiento limitado de uranio por parte de Teherán. Trump enfatizó: “Bajo nuestro potencial Acuerdo, ¡NO PERMITIREMOS NINGÚN ENRIQUECIMIENTO DE URANIO!”.
Además, el republicano criticó a su predecesor, Joe Biden, culpándolo de la situación actual. Según Trump, Biden debería haber detenido a Irán de “enriquecer” uranio hace tiempo.
La cuestión del enriquecimiento de uranio ha sido un punto controvertido en las negociaciones entre Irán y Estados Unidos, en intentos de revivir el acuerdo del cual Trump se retiró en 2018. Mientras Teherán defiende su derecho a continuar su programa nuclear con fines civiles, los Estados Unidos lo consideran una “línea roja”.
El mandatario también señaló que había advertido previamente al Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, para que se abstenga de atacar instalaciones nucleares iraníes mientras continúan las conversaciones diplomáticas.

Según reportes, Washington ha propuesto que Irán limite el enriquecimiento de uranio a niveles bajos y únicamente por un tiempo determinado. Esta oferta, presentada recientemente a Teherán, permitiría cierta actividad nuclear bajo condiciones estrictas. Sin embargo, diplomáticos iraníes han mostrado descontento con las propuestas estadounidenses, debido a que no conceden a Irán la continuidad de su enriquecimiento de uranio dentro de sus fronteras.
Las propuestas de Estados Unidos se presentaron por primera vez de manera escrita, mediadas por el ministro de Asuntos Exteriores de Omán, Sayyid Badr Albusaidi, quien visitó Teherán para entregar la oferta. La falta de concesiones sobre el tema del enriquecimiento ha llevado a funcionarios iraníes a preparar una respuesta negativa, lo que podría ser visto como un rechazo a la oferta estadounidense. Estas tensiones continúan en un contexto donde una ruptura total de las conversaciones podría llevar a sanciones más severas por parte de la ONU y acciones militares conjuntas de Estados Unidos e Israel sobre las instalaciones nucleares iraníes.