El máximo mandatario estadounidense aseguró que quiere aprovechar la Cumbre del G-20 para reunirse con el presidente chino, aunque este aún no ha dado respuesta al posible encuentro.
Por Redacción El Político
Las negociaciones llevan tiempo y Donald Trump lo sabe, es por eso que no tiene la intención de acelerar todas las cosas con su homónimo chino Xi Jinping ni tampoco para el aumento de los aranceles con respecto a otros bienes con valor de 325.000 millones de dólares.
El presidente de los Estados Unidos aseguró que la relación entre ambos países es buena, pero que podría estar propensa a irritarse dependiendo de las decisiones que se tomen. Muchos productos que vienen de China tienen impuestos, sin embargo ha considerado colocar más de estos gravámenes a otras importaciones que no han sido afectadas, como por ejemplo celulares, computadoras o ropa.
"No tengo fecha límite. Mi fecha límite es lo que hay aquí. Nadie puede resolverlo. Pienso que terminaremos alcanzando un acuerdo con China. Tenemos una muy buena relación, aunque es un poco irascible ahora, como esperarían. Creo que realmente quieren lograr un acuerdo", indicó.
El próximo 29 de junio se llevará a cabo la llamada Cumbre del G-20 con sede en Osaka, Japón, donde presuntamente Donald Trump tiene el interés de reunirse con el presidente Xi Jinping, pero aún Pekín no ha dado el sí ni se ha manifestado sobre esto. Luego de su visita a territorio asiático se decidirá si aplicará o no el resto de los impuestos mencionados anteriormente.
A pesar de los intereses, el máximo mandatario estadounidense no se sintió muy cómodo con el hecho de que se suspendiera en mayo las negociaciones y que, según autoridades del gobierno, China retirara parte de los compromisos alcanzados. "Pensamos que teníamos un acuerdo y desafortunadamente decidieron que iban a cambiarlo, y no pueden hacer eso conmigo. Pero algo va a pasar y creo que va a ser algo muy positivo", dijo.