Washington sigue de cerca el transcurrir de los acontecimientos en Venezuela. Este lunes, la administración del presidente Joe Biden reaccionó a la más reciente arremetida del régimen de Nicolás Maduro contra la oposición venezolana.
El Político
Desde el Departamento de Estado aseguraron que “Estados Unidos tomará medidas si Maduro y sus representantes no cumplen con sus compromisos de la hoja de ruta electoral”.
La declaración se produjo a horas que el sistema de justicia controlado por la tiranía suspendiera, de un plumazo, la primaria realizada por la oposición el domingo, 22 de octubre.
Aquel día, resultó victoriosa María Corina Machado. Con más de 90% de los sufragios, la lideresa se convirtió en la candidata opositora que competirá con el chavismo en las presidenciales de 2024.
Tal triunfo fue dejado sin efecto mediante una sentencia exprés del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que le es fiel al régimen. En su fallo, la corte también cargó contra el proceso comicial en sí mismo.
De manera paralela, representantes de la Comisión Nacional de Primaria (CNdP), el órgano opositor que organizó y efectuó la votación, se presentaron en la sede de la Fiscalía General que trabaja para la dictadura.
El Ministerio Público, liderado por Tarek William Saab, les ha imputado cargos que van desde la usurpación de funciones hasta la legitimación de capitales. También les acusa de haber desarrollado una elección fraudulenta.
Los movimientos del chavismo contrarían el espíritu del consenso logrado en Barbados el martes, 17 de octubre. En esa fecha, representantes de la legítima oposición venezolana y miembros del régimen firmaron un acuerdo de entendimiento.
A la luz de ese pacto, Nicolás Maduro y su entorno darían pasos verificables hacia la realización de comicios presidenciales libres y democráticos. Dentro de las líneas del acuerdo también se incluyeron garantías para el proceso de primaria.
Un día después de la rúbrica, el Departamento del Tesoro anunció la suspensión temporal de varias de las sanciones impuestas a la tiranía. En consecuencia, se emitieron licencias generales.
Las autorizaciones dieron luz verde a las actividades de compañías foráneas con la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa). De igual modo se permitió la inversión en el sector minero venezolano.
Todas las medidas podrían ser sometidas, sin embargo, a revisión. Estados Unidos, que calificó la primaria opositora como “un hito importante en el progreso de Venezuela”, ve con desconfianza las acciones del chavismo contra la elección, sus hacedores y su ganadora.