La secretaria de Salud estadounidense, Sylvia Burwell, destacó la cooperación en medicina como una de las áreas en las que más puede avanzar la nueva relación entre Cuba y EE.UU., después de que ambos países firmaran este jueves un acuerdo para la investigación en la lucha contra el cáncer.
"Somos optimistas porque los pasos que estamos dando van a facilitar este tipo de acuerdos en materia de salud, no solo sobre el cáncer. Creo que podemos aunar esfuerzos y espacios en áreas en los que beneficios son mutuos", señaló Burwell a la prensa al finalizar su primera visita oficial a Cuba.
Burwell llegó el jueves a Cuba para participar en un encuentro regional para el enfrentamiento de arbovirus como zika, dengue y chikunguña, con representantes de 30 países de América, donde la situación epidemiológica por estos vectores es preocupante.
La secretaria de Salud de EE.UU. -donde hay casos autóctonos de zika en Florida y Puerto Rico- destacó el buen trabajo que se desarrolla en Cuba para la prevención y el control vectorial de los arbovirus desde los niveles de atención primaria.
Cuba ha logrado contener la epidemia de zika con un intenso programa preventivo y de fumigación que logró mantener los casos nativos en tres, además de treinta importados, sometidos a un intenso programa de seguimiento.
Además, la isla se ha declarado territorio libre de contagio de dengue desde julio -tras registrar 1.600 casos el año pasado-, y no se ha dado ningún caso de chikunguña este año en Cuba.
La secretaria de Salud también se refirió al último paquete de medidas del presidente Barack Obama para relajar el embargo, que entró en vigor el pasado lunes, que ya permite a Estados Unidos adquirir medicamentos fabricados en Cuba, aunque no a la inversa.
En ese sentido, recordó que esto abre la puerta al uso en pacientes estadounidenses de la vacuna terapéutica contra el cáncer de pulmón "Cimavax EGF", desarrollada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de la isla.
Esa institución firmó en abril de 2015 un acuerdo con el Instituto Roswell Park contra el Cáncer, ubicado en Nueva York, para comenzar los ensayos clínicos de ese fármaco, que para su uso generalizado en pacientes todavía requiere la validación de la Agencia de Alimentos y Medicamentos (FDA, en sus siglas en inglés).
También se abre la puerta al uso en EE.UU. de otros exitosos fármacos desarrollados por el CIGB de Cuba, como el Heberferon, para el tratamiento del cáncer de piel, o el Heberprot-P, para el pie diabético.
Con información de EFE