Durante la presidencia de Pedro Sánchez las relaciones entre EEUU y España han llegado a su punto más bajo. De hecho, el pasado 4 de octubre, el presidente de la comisión de Exteriores del Senado de Estados Unidos acusó gobierno español: " de estar fuera de la democracia y las provisiones de derechos humanos que se esperan de un aliado" por sus políticas hispanoamericanas. La pregunta es: ¿Se hunde la relación trasatlántica?
El Político
El presidente de la comisión de Exteriores del Senado de EEUU, Bob Menéndez, es uno de los senadores más influyentes en Washington, y se comunica directamente con Joe Biden.
Sin embargo, la postura de Menéndez con respecto a España no la tiene él solamente; de hecho, hace poco la Casa Blanca no invitó a España a un foro sobre seguridad digital, reportó ABC.
Lo grave es que el foro de seguridad digital fue organizado por el mismísimo presidente de EEUU, Joe Biden, ¿El objetivo del mismo? Hablar de estrategias para aniquilar el problema de los ciberataques.
¿Qué acciones pudo entorpecer la relación entre España y EEUU?
Existen varias acciones desde hace tiempo que no deben haber sido bien vista por EEUU. Por ejemplo, "la abrupta retirada de las tropas de Irak por parte de José Luis Rodríguez Zapatero en 2004.rcordó ABC.
No obstante, a pesar de este episodio, la relación entre EEUU y España fue estable. Incluso cuando hubo problemas en las relaciones bilaterales durante las presidencias de George W. Bush y Zapatero.
Ahora, EEUU aparta a España a través de los aranceles; adicionalmente la deja de lado en proyectos que pueden hacer en conjunto: y además critica abiertamente al país europeo, tanto en encuentros en la Casa Blanca como en el Capitolio.
Las relaciones entre EEUU y España están en el peor momento en democracia
Javier Rupérez, embajador de España ante EEUU, en el período 2000-2004 asegura:
"No es exagerado decir que las relaciones están en el peor momento en democracia".
Luego agregó; "Creo que Menéndez refleja -claramente- qué es lo que piensa el Gobierno americano sobre la situación en España; ya que Menéndez se ha convertido, de una manera muy clara, en el portavoz de lo que piensa el Gobierno de Biden sobre España".
Según Rupérez:. "Menéndez influyó en que la primera llamada entre Pedro Sánchez y Biden fuera tan tarde; el 22 de agosto, siete meses después de la investidura de Biden, y en el marco de la retirada de tropas extranjeras de Afganistán".
Durante la presidencia de Mariano Rajoy, las relaciones entre Espala y EEUU fueron normales. A Rajoy, Donald Trump le dedicó todos los honores en su visita a Washington el 27 de septiembre de 2019. Le alojó en la Casa Blair, frente a la Casa Blanca, y alargó su reunión bilateral con una comida con destacados miembros de ambos gabinetes.
¿Qué pasó entre EEUU y España en el 2019?
Algunas decisiones de Pedro Sánchez cayeron mal en EEUU, principalmente en el Pentágono.
En mayo de 2019, en un momento de máxima tensión en el golfo Pérsico, Trump envió el portaviones Abraham Lincoln a aguas internacionales frente a Irán para asegurar el suministro mundial del crudo. Con ese portaviones viajaba una fragata española, la Méndez Núñez. Sánchez la retiró apresuradamente alegando que esa misión en Irán «no estaba prevista», narró ABC.
La fragata llevó a los soldados a un puerto de India para que votaran en las elecciones del 26 de aquel mes.
Por aquel entonces, el Gobierno español siempre atribuía a la impetuosa personalidad de Trump los desaires padecidos por Sánchez.
En abril de 2021 el departamento de Estado de EEUU. publicó un informe sobre derechos humanos en que denunciaba actos de "violencia y acoso de gobernantes españoles hacia la prensa".
Aquel informe anual, comenzó con Trump ,pero la Administración Biden lo publicó.
En el informe denunciaron los continuos ataques a la prensa de Pablo Iglesias, y los casos de corrupción de su partido Podemos.
La realidad es que no fue Donald Trump que se alejó de España; el verdadero quiebre fue la entrada formal de Podemos en el gobierno de España en enero de 2020.
Los puntos de agravios
El primer punto de agravio fue la aprobación por la vía rápida de la tasa Google; un impuesto sobre servicios digitales que gravará en un 3% los ingresos que las multinacionales tecnológicas obtengan de los servicios de publicidad digital, servicios de intermediación y venta de datos en España.
El grueso de ese gravamen cae sobre las empresas estadounidenses: Google, Facebook o Amazon. El Consejo de Ministros aprobó el proyecto de ley el 8 de febrero de 2020.
El 13 de enero de 2021 la oficina comercial de la Casa Blanca publicó un informe de 41 páginas sobre la tasa digital española en la que acusaba a España de «discriminar a las empresas estadounidenses, y restringir el comercio con EE.UU.».
Los resultados de la investigación de la Casa Blanca eran elocuentes: de las 39 empresas afectadas por esa tasa digital, 25 eran estadounidenses y sólo dos españolas.
Finalmente, el 2 de junio de 2021, EE.UU. aprobó aranceles del 25% a 27 productos españoles: gambas, pulpo, bolsos, cinturones, calzado y cristal decorativo; adicionalmente los suspendió temporalmente a la espera de poder negociar con España hasta el próximo 29 de noviembre.
Relación entre España, Cuba y Venezuela
Sin embargo, el punto de mayor tensión con Washington ha sido la política del gobierno de Sánchez y de Podemos hacia Cuba y Venezuela, como indican el senador Menéndez. aseveró ABC.
Para Carrie Filipetti, exsubsecretaria adjunta para Cuba y Venezuela en el Departamento de Estado norteamericano hasta enero, y actualmente directora ejecutiva del grupo Vandenberg Coalition:
"Hay un sentimiento creciente entre la izquierda y la derecha de EEUU de que la política exterior de España prioriza sus propios intereses económicos y financieros por encima de los derechos humanos, particularmente en lo que se refiere a Cuba y Venezuela".
"El resto de la Unión Europea esperaba que España liderara los esfuerzos en ese ámbito, y no lo hizo. Y, de hecho, muchas veces España evitaría que esa misma UE tomara medidas importantes para apoyar la democracia, por razones realmente desconocidas", aseveró Filipetti-
"Y, por lo tanto, no solo no están facilitando una política exterior que ponga los derechos humanos por delante, sino que también impiden que la UE se alce en favor de los derechos humanos», puntualizó la directora ejecutiva de Vandenberg Coalition.