La revolución liderada por Hugo Chávez es sinónimo de caos y destrucción en Venezuela. Por ello, el régimen de Nicolás Maduro se ve obligado a revertir las expropiaciones que su mentor adelantó durante años.
El Político
Ante el descalabro de la economía venezolana, Maduro se ve obligado a hacer algo para tratar de revertir la destrucción del aparato productivo de Venezuela.
Luego de que la corrupción y la incapacidad de los funcionarios estatales arruinaran a decenas de empresas privadas nacionalizadas, el régimen quiere ahora revivir la economía con capital privado.
El fracaso anunciado de las mediocres privatizaciones de Maduro https://t.co/tuSPP5ani6
— Casto Ocando-Primer Informe (@cocando) January 14, 2021
De cierta forma lo ha conseguido con la re-privatización de empresas como Abastos Bicentenario, la cafetalera Fama de América, el centra azucarero Pío Tamayo, Lácteos Los Andes, y el proveedor de insumos agrícolas Agroisleña.
Pero las mediocres privatizaciones de Maduro pueden llegar muy tarde.
Maduro, ante un auditorio complaciente lleno de chavistas y alacranes, siguió mintiendo al país. Esto fue lo que dijo de PDVSA: https://t.co/x7q4rJMZfz
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Un trabajo de Tal Cual revela como en secreto Maduro ha llegado a acuerdos con inversionistas para volver a privatizar las empresas expropiadas.
Esta labor parece imposible. Se trata de empresas de los sectores agroalimentario, de importación y distribución de insumos agrícolas, producción de azúcar y productos lácteos. También hay grandes cadenas de supermercados.
La estrategia del chavismo es una culebra de dos cabezas https://t.co/gERedDnXjT
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El informe plantea que «el fracaso de la gestión chavista se evidencia en la poca o nula oferta en el mercado de productos que anteriormente despachaban estas compañías».
Las promesas vacías de mejorar la producción y distribución de las empresas, además elevar las condiciones laborales para los empleados, eran todas mentira.
Tal Cual cita las declaraciones del El economista Víctor Álvarez, quien sostiene que el gobierno necesita un sector privado que genere divisas, y por eso abre el mercado interno al capital privado nacional y extranjero.
Maduro vuelve a mentir diciendo que PDVSA volverá a 1.500.000 b/d de producción "en los próximos meses" https://t.co/x7q4rJMZfz
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Medida desesperada
Alvarez agrega que «la Venezuela rentista se agotó. El petróleo seguirá siendo una actividad económica importante pero no generará el mismo caudal de petrodólares de antes».
Esto impone diversificar la producción y la oferta exportable, lo cual requiere abrir la economía a la inversión privada nacional y extranjera». Si es que alguien se atreve.
En realidad, las reprivatizaciones no cambian el clima de desconfianza. Igualmente, iniciativas como la llamada «ley antibloqueo», tampoco atraen el tipo de inversionistas que el país necesita.
Falsas privatizaciones
De hecho, esa ley solo provee un marco para institucionalizar y legalizar las prácticas corruptas de la cúpula chavista.
Al mismo tiempo, millones de dólares empleados en expropiaciones fueron pérdidas para la nación venezolana. Sólo elevaron de manera exponencial e inútil la deuda externa. Y con es deuda se sentaron las bases para un un clima de desconfianza que Maduro no puede deshacer.
Lo cierto es que el chavismo es incapaz de mantener las empresas expropiadas. Menos aún puede hacerlas productivas. Tampoco pueden generar empleo.
Por su parte, la integrante de Cedice Libertad, Ana Carrasquero, destaca que, «hablar de privatizaciones es un absurdo ya que no se cuenta con garantías de funcionamiento de la propiedad privada, la libertad económica, la competencia, los contratos y el libre intercambio de bienes y servicios.
Añade que hacen falta reglas ciertas para asegurar derechos e impedir abusos en su ejercicio. «Todos estos elementos son indispensables para generar confianza», agrega.
Carrasquero puntualizó que "las mediocres privatizaciones de Maduro no son señales de liberalización del mercado, apunta. Más bien son reacomodos que permiten al chavismo seguir adelante"
Fuente: 1erinforme