¿Podrá Diosdado Cabello quedarse con El Nacional? es el buque insignia de la libertad de prensa de Venezuela durante tantas décadas, al cual necesitan liquidar para completar lo que están haciendo: ¡una tiranía totalitaria!”
El Político
Estas palabras del expresidente de gobierno de España, Felipe González, sintetizan la historia de un diario emblemático. Miles de voces protestan la decisión del Tribunal Supremo de Justicia del régimen de Nicolás Maduro contra El Nacional.
Otra arbitrariedad de Diosdado
Desde Madrid, el líder histórico del Partido Socialista Español se refirió a la sentencia que obliga al diario venezolano a pagar 13,3 millones de dólares a Diosdado Cabello por daño moral.
“El artilugio económico es obvio e instrumental para arruinar a todo aquel que no cuente con los recursos ante una arbitrariedad así”, señaló.
Además, la considera una señal de “tiranía totalitaria” y “un contraataque para acabar con la libertad de prensa”.
Una historia de lucha por la Libertad
El 3 de agosto de ese año de 1938 salió a la calle por primera vez El Nacional, que habría de convertirse en el periódico venezolano de referencia, con una tirada incluso superior a la del más conservador El Universal.
El primer jefe de redacción de El Nacional fue Miguel Otero, y su primer director, Antonio Arráiz.
El ex presidente Ramón J. Velásquez ilustra sobre el nacimiento:
“Con José Benavides, esposo de la ilustre Clara Rosa y un gallego de apellido Blanco[1], muy buen periodista. Esos tres con Miguel Otero se pusieron y compraron todos los periódicos de Francia, España, Inglaterra, EEUU, Argentina para hacer un nuevo periódico.
Trabajaron y trabajaron hasta sacar los cuatro cuerpos. Eso es un invento de ellos, los cuatro cuerpos. Hay un anécdota muy buena, cuando diez años más tarde Ramírez Mac Gregor compra el periódico Panorama de Maracaibo.
"Se reúnen los jóvenes periodistas a ver cómo hacen para dar un golpe periodístico, entonces no encuentran la fórmula, así que llega Ramírez Mac Gregor, quien era el dueño y les dijo no, ¡qué invento!, cuando se ha inventado una cosa no se vuelve a inventar, copien El Nacional", cuenta el ex presidente Velásquez
Al servicio de la gente
La trayectoria de El Nacional tiene una sola constante, está al servicio de la gente, y esa decisión, o política editorial le ha costado cárcel, retiro de anunciantes y todo tipo de castigos por parte de los gobiernos.
Todos a la cárcel
Uno de los casos más recordados ocurrió el 22 de abril de 1950. Dentro de una crónica deportiva, un linotipista del taller escribió: “Acudieron los tres cochinitos”. Tuvo la osadía de comparar a los tres integrantes de la junta militar con los tres cerditos que aparecían una marca de manteca vegetal, para satirizar.
Rómulo Betancourt narró las consecuencias de la intervención de la crónica:
“Después de clausurado El Nacional la dictadura impuso, para permitirle circular de nuevo, que erradicara de sus páginas a un determinado número de firmas de escritores.
Señalada por la temida Seguridad Nacional El Nacional sacó de sus firmas e a los poetas Juan Liscano, y Lucila Palacios; a J.M. Siso Martínez, el más valioso ensayista joven de Venezuela y Luis Esteban Rey. Los cuatro fueron exilados.”
Tumbaron a Pérez Jiménez
Los años de dictadura de Marcos Pérez Jiménez se caracterizaron por una arremetida comunicacional del gobierno y una persecusion contra los medis y los periodistas.
Cuando los se reúnen en la sede de la Asociación Venezolana de Periodistas enseguida fue allanada y los cuarenta y tres comunicadores terminaron en la cárcel de El Obispo. Sin distinción de género, fueron detenidas varias mujeres, entre ellas Cecilia Carvajal de Arocha, periodista que utilizaba el pseudónimo de Lucila Palacios.
La Asamblea Constituyente como aval del régimen
El 9 de enero se instaló la Asamblea Nacional Constituyente y en ella se aprobó la ratificación en la presidencia provisional de Marcos Pérez Jiménez, a pesar de la oposición de COPEI y del URD.
El 15 de abril fue promulgada la Constitución de 1950. El 17 de abril, Pérez Jiménez es nombrado Presidente.
Desde ese momento El Nacional en todos sus niveles, desde los dueños hasta los obreros se dedicaron a luchar por la democracia. Muchos terminaron presos y torturados.
Los intelectuales activados
En el archivo del diario El Nacional se reunió el director del periódico, Humberto Rivas Mijares, con Mariano Picón Salas, Humberto Cuenca, Luis Barrios Cruz, Luis Villalba Villalba, Alexis Márquez Rodríguez, Oscar Guaramato, Isaac Pardo y Miguel Otero Silva, para leer un proyecto de documento redactado por Mariano Picón Salas.
El 15 de enero, circuló la Declaración de los Intelectuales sobre la situación política de la nación, documento que se imprimió en dos ocasiones debido al apoyo de los linotipistas. Allí queda registrado el espíritu por la democracia y la LIbertad que ha mantenido el diario.
La huelga general
La Junta Patriótica fijó el día 21 como fecha para la huelga general, la cual estalló al mediodía. Los trabajadores de la prensa fueron factores indispensables en esta huelga, no sólo los periodistas o los dueños de medios, los gráficos, los sindicalistas, todos unidos decidieron dejar de trabajar.
El Universal, La Religión, Últimas Noticias, El Nacional, La Esfera, El Carabobeño y Panorama, y muchos trabajadores del oficialista diario El Heraldo, con lo cual también dejó de circular.
Y el dictador salió
El 22 de enero, el país se mantuvo en tensa calma, la huelga general continuaba. Los altos jefes militares conforman una Junta Militar de Gobierno que pide la renuncia a Pérez Jiménez quien sale del país con su familia y algunos funcionarios de confianza.
Un periodista anuncia los nuevos tiempos
Pérez Jiménez fue sustituido por una Junta Militar presidida por el contralmirante Wolfang Larrazál. Correspondió al periodista Fabricio Ojeda anunciar:
“Pueblo de Venezuela, les habla Fabricio Ojeda, Presidente de la Junta Patriótica, para anunciar que hemos triunfado que la dictadura ha sido derrotada. El tirano huyó cobardemente. Todos a la calle, a ratificar el triunfo de la revolución”[3]
Tras más de diez años de férrea censura, los medios de comunicación, como en el 36, son factor importante en el desenlace político.
Represión a los medios
En la relación con los medios de comunicación, la democracia representativa ha mantuvo diversas posición. Con Rómulo Betancourt el gobierno tendría dos etapas.
Hasta 1960 la preocupación giraba en torno a periodistas y editores cercanos al gobierno de Pérez Jiménez, pero luego la represión se enfocó en los medios izquierdistas. El Nacional también fue víctima.
El Nacional “comunista” Miguel Otero Silva
En la lucha por el poder, el director del diario El Nacional, Miguel Otero Silva, resultó arrastrado por las circunstancias de un país en convulsión. Los grandes anunciantes como Ford, Chevrolet, los automercados Cada suspendieron sus avisos en El Naciona.
Con el apoyo de ANDA, la asociación de anunciantes para “obligarnos, por medio del chantaje y la coacción, a torcer la línea política y periodística de unidad democrática que ha caracterizado a este diario desde su fundación” , señalaba un editorial del diario.
En este caso, las fuerzas económicas y políticas unidas fueron implacables hasta que en marzo de 1963 triunfó el boicot:
Y Miguel se tuvo que ir
Miguel Otero Silva renunció a la dirección de El Nacional y vendió las acciones del periódico a su hermano Alejandro Otero, vinculado al empresariado.
Despidieron a los redactores, empleados administrativos y obreros gráficos acusados de “comunistas”; sacaron a los colaboradores de izquierda y cambiaron a la junta directiva. Cumplidas todas las órdenes regresaron los anunciantes.
Política y medios marchan juntos
Con la democracia nacieron y se consolidaron los medios de comunicación criollos quienes apoyaron a los partidos políticos y a la democracia. Las casas editoriales solidificaron su piso económico con grandes contratos y pautas publicitarias.
De allí se formó una relación homogénea, a tal punto que los grupos editoriales tenían cuotas de poder en el Ejecutivo y el Congreso Nacional. Marcharían juntos por cuatro décadas.
La pelea que Chávez quiso cazar
El nuevo siglo sorprende a Venezuela bajo el manto electoral. Entonces se desata “la peleíta” anunciada por Chávez. En el programa Aló Presidente del 27 de febrero de 2000, aniversario de los sucesos de El Caracazo, acusa a los medios de hacerse eco de los enemigos del proceso de cambio.
“Tampoco aceptaré chantaje de los dueños de los medios de comunicación ni del dueño de El Nacional, ni del dueño de El Universal, ni del dueño de la Cadena Capriles, ni del dueño del Canal 2, ni del dueño del Canal 4, ni del dueño del Canal 10, ni del dueño del otro canal, el que sea, el de nadie, no aceptaré chantajes de nadie".
La meta era acabar con el periódico
Desde ese día El Nacional ha sido objeto de toda clase de persecusiones por parte de los gobiernos socialistas.
El 29 de enero de 2002 renunció al cargo el Ministro de Interior y Justicia Luis Miquilena, quien había sido uno de los principales motores que llevaron al triunfo electoral de Chávez. La periodista Ybéyise Pacheco adquirió notoriedad al divulgar denuncias contra funcionarios de la Guardia Nacional.
Una bomba en la empresa
El 31 de enero de 2022 explotó una bomba en Así es la Noticia, periódico perteneciente al grupo editorial El Nacional. El 4 de febrero de 2002 se transformó en un día de cadenas, marchas y cacerolas, el ambiente nacional estaba cada día más tenso.
Gobernar desde los medios de comunicación
Hugo Chávez Frías gobernó con y desde los medios de comunicación, más allá de sus limitaciones físicas. La red comunicacional que fue conformando hasta culminar en una hegemonía controlada por el gobierno permitió al mandatario gobernar desde la televisión, la radio, los periódicos o internet.
La renta petrolera resultó un factor fundamental para financiar esa red y sus integrantes.
La llegada de Maduro complica la situación
La llegada del nuevo Presidente no cambia esta situación, al contrario, la agudiza. Con otras características personales, el elegido sucesor requiere aun más de los medios, no le basta controlarlos o intervenirlos.
Necesita disminuir el impacto de los mensajes críticos, incluso los programas de humor, unificar las frases, y para ello se vale de los mismos mecanismos utilizados por Chávez.
La pretendida hegemonía comunicacional
Las cadenas interminables, los llamados de atención y el control de los contenidos aumentan cada día. Este poder firme, fuerte y consolidado tiene como respaldo principal la hegemonía mediática gubernamental.
En manos de la revolución está hoy más del 90% de los medios, pero las audiencias optan por otros medios, el cable e incluso los medios tradicionales. Y pese a no tener papel, El Nacional sigue siendo la gran referencia mediática.
Repudio mundial
Por otro lado, José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch, Andrés Pastrana, expresidente de Colombia, el cantante Ricardo Montaner y el director del diario ABC de España figuran entre las personalidades conmocionadas por la decisión.
La sentencia del Tribunal Supremo de Justicia del régimen de Nicolás Maduro obliga a El Nacional a pagar un aproximado de 13,3 millones de dólares a Diosdado Cabello, el número dos del régimen, por daños morales.
¿Diosdado se va a quedar con El Nacional?
El repudio a esta sentencia es mundial“¿Resulta que Diosdado Cabello se va a quedar con el periódico El Nacional de Venezuela?”, se preguntó José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch.
Andrés Pastrana, expresidente de Colombia condenó asimismo la vil persecución a El Nacional. “Ese asalto a la libertad de expresión es un paso de la narcodictadura para silenciar aún más los derechos democráticos en Venezuela”, dijo.
El cantante Ricardo Montaner expresó su solidaridad. “Pretenden desaparecer una institución que por más de 70 años ha informado y atendido las necesidades del pueblo”, manifestó.
Y hasta el ABC de España protestó
Julián Quirós, director de ABC de España, indicó que se solidarizaba con El Nacional en una llamada al presidente editor. “Sabemos lo difícil que es ejercer el periodismo independiente en Venezuela y lamentablemente estamos ante un nuevo caso que atenta contra las libertades, no solo de los periodistas sino del pueblo venezolano y contra la libertad de información”, señaló.
Mientras, el editor Miguel Henrique Otero, simplemente anuncia: Desde El Nacional, seguiremos informando.
Fuentes:
Velásquez, Ramón J. Entrevista. realizada por Rosana Ordóñez. 20-1-2009.
[1] Betancourt, Rómulo. Venezuela Política y Petróleo. Editorial Senderos, 1969. Bogotá. Pág. 611
[1] Díaz Rangel, Eleazar, Días de Enero. Obra citada. Pág. 59
[2] Molina Peñaloza, Manuel Isidro. Nacimiento y desarrollo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa. Tesis de Grado. www.sntp.com.ve
[3] Dávila Gómez, Wilber. http://tachiraonline.blogspot.com/2011/06/fabricio-ojeda-emblema-de-lucha-contra.html
http://www.alopresidente.gob.ve/…alo/.Nro. 031.27-2-2000