El Congreso salvadoreño liberó el pasado jueves al Gobierno de generar más deuda soberana para el pago de las pensiones al reformar el Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP) que asumirá dicha responsabilidad hasta finales de 2017.
La reforma, alcanzada con 47 de 84 votos, y que fue introducida al pleno de último momento, se da a pocos días para que el Gobierno se quede sin fondos para pagar las pensiones del antiguo sistema y de los primeros retirados del actual.
Con las ganancias generadas por el FOP, creado en 2006, se pagaban ciertos beneficios de los jubilados, como el aguinaldo de fin de año, pero con la enmienda cubrirá el total de las "obligaciones previsionales" heredadas por el Gobierno tras la privatización de 1998.
La medida ha sido criticada por la oposición política y los administradores de fondos de pensiones, que rechazan que sean tocados los ahorros de los trabajadores.
"El sistema (de pensiones) ha venido siendo sostenido con deuda, sobre todo en lo que corresponde a la garantía obligatoria que le quedó al Estado de pagar pensiones vitalicias, a pesar de no recibir cotizaciones para eso", aseguró la presidenta del Congreso, la oficialista Lorena Peña.
LEA TAMBIÉN: El Salvador: Pago de pensiones es el “gran problema” de la deuda pública
Añadió que este mecanismo "resuelve el problema del financiamiento" para pagar las pensiones, pero que no implica el abandono de la discusión para una reforma al sistema "para darle una solución definitiva".
Por su parte, el diputado del oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) Guillermo Mata aseguró que la medida es "transitoria" porque "las verdaderas van a venir con la reforma al sistema de pensiones".
La medida no fue apoyada por el principal partido de oposición, la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), bajo el argumento de que los fondos para pagar las pensiones saldrán del ahorro de los trabajadores.
Según ARENA, su negativa se da porque los títulos valores emitidos por el FOP son adquiridos, en su mayoría, por las empresas Administradoras de Fondos de Pensiones, que reciben las cotizaciones de los trabajadores.
"Para esta deuda del Estado quieren dar papeles que ni siquiera constituyen una promesa de pago" y "no podemos pretender que esos papeles sean garantizados por los mismos fondos de los trabajadores", señaló el diputado de ARENA Réne Portillo Cuadra.
De igual forma, la Asociación Salvadoreña de Administradores de Fondos de Pensiones (ASAFONDOS) criticó la medida y aseguró que con ella "los trabajadores nunca recibirán el pago del capital e intereses de los más de 5.000 millones (de dólares) que obligatoriamente le han prestado al Gobierno a través del FOP".
"Esta reforma significa un ciclo infinito de generación de deuda, la cual iría creciendo sin control", advirtió el ente.
Con información de EFE