Con la excusa de proteger a las comunidades los gobernantes dan órdenes que deben ser cumplidas, sin aprobación del Parlamento. Algunos gobernadores y alcaldes levantan sus voces opositoras y son reprimidos. Multas y cárcel son algunas de las penas impuestas a criterio de las policías represivas y en algunos países hay castigos "ejemplares" tales como poner a las personas al sol o detener a periodistas que no cumplen la información oficial.
El Político
La tentación totalitaria emerge en los momentos de crisis, las organizaciones de derechos humanos comienzan a alertar sobruna “supremacía total” sobre la toma de decisiones mientras dure la crisis a pesar de que la Constitución de todos los países reparten las decisiones con el parlamento y el poder judicial.
Los líderes populistas aplican duras medidas, como vigilancia no supervisada de los celulares de sus ciudadanos o largas penas de cárcel para los que incumplen los decretos de cuarentena.
Límites para los "estados de excepción"
La responsable de derechos humanos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa dijo que si bien comprende la necesidad de actuar con rapidez para proteger a la población ante la pandemia del nuevo coronavirus, los estados de emergencia declarados deben incluir un límite temporal y supervisión parlamentaria.
En momentos de emergencia nacional, los países suelen tomar medidas que los activistas de derechos perciben como una erosión de los derechos civiles, como un aumento de la vigilancia, toques de queda y restricciones a los desplazamientos o a la libertad de expresión. China aisló ciudades enteras este año para detener la propagación del virus, e India impuso una cuarentena a todo el país.
Las absurdas medidas que han tomado los mandatarios comienzan a ser rechazadas por la población que no admite, sobre todo en los países m{as pobres, el encierro en casas hacinadas que niega toda posibilidad de trabajar y adquirir insumos.
En Bolivia sólo se compra comida una vez a la semana
Los bolivianos tendrán solo un día a la semana para salir a aprovisionarse, de acuerdo al número de su cédula de identidad.
Aquellos que violen las restricciones recibirán una multa de alrededor de US$150 y serán retenidos en celdas durante ocho horas.
Brasil enfrenta al Presidente con los gobiernos regionales
El presidente Jair Bolsonaro, quien criticó la "histeria" en las reacciones mundiales frente a la pandemia, anunció el 19 de marzo el cierre de las fronteras terrestres de Brasil por un plazo de 15 días, para todos sus vecinos.
A nivel regional, los gobiernos de Sao Paulo y Río de Janeiro suspendieron las clases, cancelaron eventos masivos y redujeron la oferta de transporte público.
Los bares y restaurantes en Brasilia también deben colocar sus mesas a una distancia mínima de dos metros.
En Chile las calles están militarizadas
El estado de excepción contempla el cierre de comercios no esenciales y el despliegue de militares en las calles para dar seguridad a los hospitales y resguardar el cumplimiento de las cuarentenas y medidas de aislamiento social.
Además, se estableció la prohibición de las visitas a los centros de adultos mayores por los próximos 30 días para evitar el contagio a las personas más vulnerables.
También se prohibieron las reuniones masivas. Si alguien no respeta esta medida, arriesga multas que van hasta los US$3.000.
En Colombia
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El Presidente Iván Duque dijo que como parte de los poderes extraordinarios que le otorga la emergencia anunciará medidas para proteger la economía.
Duque se enfrentó a algunos gobernadores que no querían acatar sus medidas, pero dijo que no se trataba de imponer sino de buscar alternativas coordinadas.
Cuba "extremó la vigilancia"
El gobierno cubano anunció este 23 de marzo la suspensión de clases, en todos los niveles, durante un mes para prevenir la propagación del covid-19.
La medida también faculta a los militares a resguardar el control en las ciudades y restringir algunos derechos, como el de reunión.
En Ecuador nada sale
Las autoridades prohibieron la salida del país de gel desinfectante, mascarillas y jabones, entre otras medidas.
La ministra de Salud ecuatoriana, Catalina Andramuño, renunció el 21 de marzo a su cargo y alegó que no le dieron fondos suficientes para enfrentar la crisis. Su sustituto es Juan Carlos Zevallos.
México
A pesar de haber registrado ya muertes a causa del coronavirus, México es uno de los países de la región que menos restricciones ha impuesto para frenar la pandemia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador acordó con EE.UU. limitar los cruces en su frontera terrestre, por lo que el paso por motivos "no esenciales" como el turismo quedó suspendido.
Sin embargo, su gobierno no ha vetado los vuelos de ninguna parte del mundo. Al entrar a la que considera como "fase 2″, el Ejército y la Marina fueron movilizados para establecer planes de contingencia y apoyo a la población.
Venezuela detiene a periodistas que informen
Nicolás Maduro decretó la cuarentena para siete estados inicialmente. El 17 de marzo la extendió a todo el país, convirtiéndose en el segundo país de la región en decretar el aislamiento obligatorio.
El periodista venezolano Darvinson Rojas, que fue detenido este pasado fin de semana, no fue trasladado a tribunales el lunes, tal y como estaba previsto, según denunciaron representantes del gremio.
Aunque aún no se han presentado cargos contra Rojas, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) denunció el sábado que su arresto se debe a una serie tuits publicados por el periodista en los que hablaba de cifras del coronavirus en el país.
El régimen chavista detuvo a una periodista por informar sobre un nuevo caso de coronavirus en Venezuela. Se trata de Beatriz Rodríguez quien tiene el mismo apellido que los voceros que informan sobre el tema, los hermanos Delcy y Jorge Rodríguez, además del ministro de Economía TArek Al aissami y el propio Maduro quien cada día informa al país en cadena obligatoria.
En Europa aumentan los abusos
El presidente de Serbia , Aleksandar Vucic, declaró el 15 de un estado de emergencia hasta nuevo aviso, el parlamento ha sido relegado, se han cerrado fronteras, la policía hace cumplir un toque de queda de 12 horas y los mayores de 65 años tienen prohibido salir de sus casas. Son algunas de las medidas más estrictas impuestas en Europa contra la pandemia de COVID-19.
El mandatario serbio, que hace teatrales comparecencias diarias emitiendo nuevos decretos, ha asumido plenos poderes, ante la indignación de opositores que le acusan de tomar el control del país de forma inconstitucional.
Al proclamar el estado de emergencia, Vucic asumió una “supremacía total” sobre la toma de decisiones mientras dure la crisis a pesar de que la Constitución solo le otorga un papel ceremonial, afirmó Rodoljub Sabic, excomisario estatal de protección de datos.
“Da órdenes que son aceptadas automáticamente por el gobierno”, dijo Sabic. “Sin controles ni garantías”.
El derecho internacional de derechos humanos permite los estados de emergencia, indicó el investigador de Amnistía Internacional Massimo Moratti, aunque advirtió que las restricciones no deben convertirse en “la nueva normalidad”.
“Estos estados tienen que durar solo mientras dure el peligro”, dijo a The Associated Press.
En España el gobierno socialista aprobó la geolocalización de las personas, lo cual implica que todas as llamadas pueden ser monitoriadas y los mensajes seguidos.
En Hungría el Presidente gobierna por decreto
Miembro de la Unión Europea, el parlamento aprobó el lunes una ley que permite al primer ministro, Viktor Orban, gobernar por decreto mientras dure el estado de emergencia declarado el 11 de marzo.
La ley también estableció penas de prisión de hasta cinco años por difundir información falsa sobre la pandemia y hasta ocho años para los que interfieren con los esfuerzos de contener la propagación del coronavirus, por ejemplo un toque de queda o una cuarentena.
Grupos de derechos y funcionarios señalaron que la ley abre la posibilidad de instaurar un estado de emergencia por tiempo indefinido y les da a Orban y a su gobierno carta blanca para restringir derechos humanos y coartar la libertad de prensa.
“Orban está desmantelando la democracia ante nuestros ojos”, dijo Tanja Fajon, miembro del Parlamento Europeo. “Esto es una vergüenza para Europa, sus valores fundamentales y su democracia. (Orban) se aprovechó del coronavirus como excusa para matar la democracia y la libertad de medios”.
Otros gobiernos han adoptado medidas extremas.
En Israel, el gobierno en funciones de Benjamin Netanyahu aprobó un paquete de medidas de emergencia para intentar frenar los contagios. El paquete incluía autorizar una vigilancia electrónica sin precedentes sobre los ciudadanos israelíes y una reducción de la actividad judicial que obligó a aplazar el juicio por corrupción al propio Netanyahu.
En Rusia, las autoridades han subido la presión sobre los medios de comunicación y los usuarios en medios sociales para controlar el mensaje sobre el creciente brote de coronavirus en el país. Moscú impuso una cuarentena el lunes y muchas regiones siguieron su ejemplo.
En Polonia hay preocupación sobre una nueva aplicación de smartphone lanzada por el gobierno para la gente que hace cuarentena en su casa.
La Fundación Panoptykon, un grupo de derechos humanos que se opone a la vigilancia, dijo que algunos usuarios que respaldan los esfuerzos de las autoridades para combatir la pandemia temen que al utilizar la aplicación estén dando demasiada información privada al gobierno conservador.
En Serbia, un grupo de activistas llamado “No ahoguen a Belgrado” ha lanzado una campaña para reunir firmas en internet contra lo que describieron como el abuso de poder y la erosión de los derechos humanos fundamentales por parte de Vucic. Sus frecuentes comparecencias, señalaron, están sembrando el pánico en una sociedad ya preocupada.
“No necesitamos la representación diaria de Vucic, sino la verdad: Datos concretos e instrucciones de expertos”, indicó la petición.
El colmo, en Filipinas
Personas confinadas en jaulas de perros o castigadas a permanecer a pleno sol durante horas son algunos de los castigos que las autoridades de Filipinas han impuesto a los que violan la cuarentena durante la pandemia de Covid-19, denunció este jueves Human Rights Watch (HRW).
“La policía y los funcionarios locales deben respetar los derechos de las personas arrestadas por violar el toque de queda y otras regulaciones de salud pública”, advirtió en un comunicado el subdirector de HRW para Asia, Phil Robertson. Señaló asimsimo que cualquier tipo de maltrato debe investigarse de inmediato y que las autoridades responsables deben rendir cuentas y ser sancionadas o procesadas.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, impuso el cierre y cuarentena estricta en la isla de Luzón -la mayor del país, donde se encuentra Manila- el pasado 16 de marzo y desde entonces la policía ha arrestado a cientos de personas.
China, víctima y acusada
Una de las peores consecuencias las sufre China, Amnistía Internacional arremetió contra los actos racistas derivados del temor internacional al coronavirus que están sufriendo tanto los chinos como los descendientes de chinos de otras nacionalidades y otras personas procedentes de países del entorno.
La ONG exigió que las cuarentenas y los cierres fronterizos fueran proporcionados. Aludió a casos de abusos llevados a cabo por los gobiernos de Australia y de Papúa Nueva Guinea.
«La censura, la discriminación y las detenciones aleatorias no tienen lugar en la lucha contra la epidemia del coronavirus. Las violaciones de los derechos humanos, más que facilitarla, obstaculizan la respuesta a las emergencias sanitarias y limitan su eficiencia», agregó Nicolás Bequelin, directivo de la organización.
Con información de AP, BBC, ABC y redes.