Después de lograr una negociación que duro casi un año entre los Estados Unidos y Venezuela, parece haber un inconveniente en el desarrollo de estos convenios.
El Político
La nación petrolera y su situación política desde la muerte del expresidente Chávez ha acaparado los titulares del mundo en diferentes instancias, y en esta oportunidad es por los inconvenientes que se desarrollan a la posible solución para la situación diplomática en el país caribeño.
Algunos analistas políticos aseveran que la gestión del presidente norteamericano Joe Biden podría sufrir una presión de sus congresistas por volver a implantar las sanciones que fueron levantadas al gobierno del país petrolero, por no lograr los resultados que se esperan.
Los resultados del dialogo
En días pasados el régimen de Maduro llegó a un acuerdo con la oposición del país, el cual se desarrolló en Barbados, con el fin de buscar una solución a la disputa gubernamental de la nación.
En el mismo se habría acordado que las elecciones presidenciales se llevarían a cabo en el segundo semestre del año 2024, como lo contempla la constitución de este país. También se aprobó una supervisión internacional para darle credibilidad a estas elecciones.
El régimen habría exigido, para continuar con dicho acuerdo, que fueran levantadas las sanciones en contra de su gobierno, a cambio habría una liberación de presos políticos y la aceptación de los términos expuestos.
Después de cerrar estas negociaciones el gobierno de los EE.UU. levanto en menos de 24 horas, después de la firma del documento, las sanciones a las exportaciones venezolanas de oro y petróleo. Estas acciones son con la duración de seis meses, que también permitió la negociación secundaria de bonos gubernamentales.
Seguidamente de este suceso el régimen realizó la liberación de algunos presos políticos, dando a entender que los términos han sido respetados hasta ese momento.
El inconveniente
Sin embargo, a todo este proceso que aparenta ser benevolente para ambas naciones, se plantea una problemática.
El domingo siguiente a las negociaciones sale victoriosa en las primarias de la oposición venezolana la candidata María Corina Machado, por el partido Vente Venezuela. Desde el régimen esto representa un reto a los convenios aceptados.
Machado, exdiputada de la Asamblea Nacional, se encuentra inhabilitada para ejercer algún cargo público por 15 años, plazo que se vencerá después del desarrollo de las elecciones presidenciales, y el régimen, a través de sus diferentes portavoces, asevera que no habrá levantamiento de esta prohibición.
La población venezolana, representada en más de dos millones de personas que votaron en estas primarias, habría escogido a machado para medirse con Maduro, resultados que rápidamente fueron desestimadas y tildados de “fraude”.
“La pregunta ahora es si el gobierno de Maduro cumplirá con el espíritu de sus vagos compromisos en respuesta a las concesiones de sanciones unilaterales de Estados Unidos”, dijo Christopher Sabatini de Chatham House, un grupo de expertos en política. "Ciertamente la reacción del gobierno a las primarias no es alentadora".
La disputa sobre Machado es uno de los muchos riesgos relacionados con el levantamiento de las sanciones de “máxima presión” impuestas durante la era Trump, que no lograron desalojar a Maduro y empeoraron el ya terrible colapso económico y la crisis humanitaria de Venezuela.
Las sanciones se impusieron en respuesta a la reelección de Maduro en 2018, que Estados Unidos y la UE consideraron fraudulenta.
Machado y la situación en Venezuela
Ciertamente Washington está interesado por la perspectiva de un aumento de los suministros de petróleo de un país con las mayores reservas del mundo y una reactivación económica venezolana que podría frenar el flujo de refugiados hacia Estados Unidos.
Sin embargo, el surgimiento de este gran problema que podría acabar con el entendimiento entre Estados Unidos y Venezuela se presenta a solo semanas de haber alcanzado un logro después de años.
El problema internacional en la nación petrolera ahora tiene un nombre, y es María Corina Machado.