Los más recientes informes de organizaciones de la sociedad civil de Estados Unidos revelan que más de 2 mil 600 latinos han fallecido a manos de agentes policiales o que se encontraban bajo custodia en los últimos seis años en Estados Unidos.
El Político
Así lo revela divulga un reporte elaborado por UnidosUS en asociación con un grupo de investigadores, académicos, activistas y familiares de latinos que perecieron a manos de uniformados policiales. Publicado por la cadena de noticias CNN, el mismo indica que existe un conteo muy por debajo de la realidad de las muertes de personas de color. Y afirma que se necesita hacer mucho más para generar una base de datos precisa que recopile información sobre el origen étnico.
Como parte de su esfuerzo inicial y consciente de las limitaciones de su método, el grupo recién formado denominado el Raza Database Project, analizó ocho bases de datos nacionales. Con ellas se rastrean las muertes a manos de la policía. En su gestión combinan noticias publicadas en los medios de comunicación y registros públicos.
De acuerdo con la versión noticiosa, los investigadores examinaron con detalle las entradas identificadas bajo las categorías de “blanco” “otro” y “desconocido” y compararon los nombres con los conjuntos de datos de apellidos del censo de 2010. Su propósito fue detectar cualquier caso en que los individuos pudiesen haber sido identificados erróneamente.
Se precisó que entre 2014 y el 9 de mayo de este año 15 mil 085 perecieron bajo custodia policial o en enfrentamientos con agentes. Tras el análisis, la cifra de latinos subió aproximadamente un 24 por ciento, de 2 mil 139 a 2 mil 653. El número de muertes de estadounidenses de origen asiático, de las islas del Pacífico y de nativos americanos también aumentó de manera significativa.
Latinos con brechas en registros oficiales
Pero estos hallazgos no pueden considerarse como definitivos. Porque el método aplicado puede dar lugar a un recuento excesivo o a uno insuficiente.
Consultado por CNN, Roberto Rodriguez, director del proyecto, declaró que las estimaciones del grupo no son exhaustivas. Y que sin embargo brindan una mirada más precisa, en especial por las brechas en la recolección de datos oficiales.
El grupo señaló que es probable que los números todavía no contabilicen a todos los latinos y otras personas de color, ya que es posible que no tengan apellidos de origen hispano.
Recientemente varios activistas y medios de comunicación se han encargado de recopilar datos sobre la violencia policial porque no existe una base de datos federal de información.
Empero se encontraron que las agencias encargadas del orden público suelen agrupar a las personas en categorías raciales más amplias y no según etnias. De acuerdo a Rodríguez, no hay una estandarización de cómo se etiqueta a las personas y no hay centralización.
Indicios preocupantes… reforma policial
Por su lado Janet Murguía, presidenta y CEO de UnidosUS, dijo que los hallazgos del grupo son un indicio preocupante de que el exceso de vigilancia en las comunidades de color podría estar más extendido de lo que se pensaba con antelación.
Añadió: “Las cifras que ya conocíamos son inaceptables, estas nuevas cifras son inconcebibles. Estos datos exigen una consideración inmediata por parte de aquellos en el Congreso que están trabajando en la muy necesaria legislación de reforma policial. Para garantizar que sus soluciones reflejan realmente el alcance del problema”.
Más adelante Rodríguez dijo que el grupo planea ampliar los hallazgos que se publicaron el jueves. Y además van a lanzar más iniciativas para profundizar en el tema de los latinos muertos a manos de la policía o bajo custodia de las fuerzas del orden público.
Fuente: CNN