El astronauta de la NASA Mark Vande Hei, qien regresó a la Tierra el 30 de marzo, dijo que la invasión rusa de Ucrania fue tema de discusión en la Estación Espacial Internacional (EEI).
El Político
"Para mí, personalmente, no era un tema que rehuyera con mis compañeros de equipo", dijo Vande Hei, y agregó que si bien las discusiones no habían sido muy largas, él "les preguntó cómo se sentían y, a veces, les hizo preguntas directas", y agregó que había encontrado las noticias de la guerra "desgarradoras".
Pero el enfoque de la tripulación de la Estación Espacial Internacional siempre había sido trabajar juntos, dijo Vande Hei, reportó LaNacion.
"Fueron, son y seguirán siendo muy queridos amigos míos. Nos apoyamos en todo, y nunca tuve ninguna preocupación sobre mi capacidad para seguir trabajando con ellos. Muy buenos profesionales, técnicamente competentes y maravillosos seres humanos. Así que siempre estaré feliz de haber podido estar en la estación espacial con ellos".
Después de 355 días a bordo de la ISS, Vande Hei regresó a la Tierra la semana pasada en una cápsula rusa Soyuz junto a los cosmonautas Anton Shkaplerov y Pyotr Dubrov.
"Es maravilloso estar de vuelta", dijo Vande Hei. "Hay algunos dolores y molestias que no tenía antes… pero estamos progresando constantemente en esa dirección", agregó.
Actualmente, en el complejo orbital habitan los astronautas estadounidenses Thomas Marshburn, Raja Chari y Kayla Barron, el astronauta alemán Matthias Maurer y los cosmonautas rusos Oleg Artemyev, Denis Matveyev y Sergei Korssakov.
Rusia y la EEI
}Vale recordar que la EEI tampoco espacó al conflicto ruso-ucraniano. Prueba de ello son las declaraciones del director de la agencia espacial rusa Roscosmos, Dmitri Rogozin, quien ha tratado de crear confusión y caos al asegurar que dejará caer la Estación Espacial Internacional (EEI).
Lo cierto es que a Rogozin le gusta hacer alarde de su poder. Desde que el mundo democrático anunció un conjunto de sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania, este funcionario convirtió Twitter en su campo de batalla particular, donde ha dado rienda suelta a su ya bien conocida tendencia a fanfarronear. reportó ABC.