Este domingo 28 de abril entraron en vigor las sanciones petroleras de Estados Unidos contra Venezuela, las cuales prohíben la importación del petroleo venezolano por parte de empresas estadounidenses.
Por Redacción El Político
Sandra Oudkirk, funcionaria del Departamento de Estado aseguró que estas medidas buscan “minimizar su recibo de ingresos de Estados Unidos y salvaguardar el sistema financiero estadounidense”.
Estas restricciones a la compra del crudo venezolano forma parte de la larga lista de sanciones que el Gobierno estadounidense ha impuesto a funcionarios, instituciones políticas y financieras e incluso a Nicolás Maduro.
De acuerdo con Mariano de Alba, experto en Derecho Internacional, desde que se anunciaron las sanciones "el comercio petrolero entre Estados Unidos y Venezuela ha caído abruptamente".
Desde enero de este año el régimen de Maduro ha estado limitado, para ese entonces Venezuela exportaba 500.000 barriles de petróleo ultra pesado a Estados Unidos. Tras las sanciones del Departamento del Tesoro, permitieron la compra de crudo por un periodo de 90 días, cuyas finanzas terminaron en una cuenta congelada en EE UU.
Treasury sanctions companies operating in the oil sector of the Venezuelan economy and transporting oil to Cuba https://t.co/embRDwNov6
— Treasury Department (@USTreasury) April 5, 2019
Para de Alba, si todavía quedaba alguna operación entre Pdvsa y cualquier empresa estadounidense o con compañías que utilicen el sistema financiero de Estados Unidos, “a partir del 28 no cabe duda de que las sanciones están en vigencia y cualquier compañía asume unos riesgos mayores de lo que asumiría antes de esa fecha”.
Ante esta situación , Guaidó se plantea recuperar CITGO, la refinería ubicada en Houston, considerada la principal importadora de petróleo de Venezuela que después de las restricciones se ve obligada a buscar otros proveedores de crudo pesado.
Con información de Voz de América