Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, prometió hoy que su entrevista con su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, prevista para el próximo martes, será "un punto de inflexión" en las relaciones entre ambos países.
El viaje de Erdogan a Washington ha causado fuertes polémicas en Turquía por el anuncio de la Casa Blanca de reforzar la lucha contra el Estado Islámico (EI) entregando armas a las milicias kurdosirias Unidades de Protección Popular (YPG), que Ankara considera terroristas por sus vínculos con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía.
"Si se hace algo bueno, lo haremos nosotros, en la OTAN, junto con América (EEUU). En nuestra alianza con la OTAN somos un país fuerte, y todo paso se debe dar junto a nosotros. En ningún caso nos asociaremos junto a América (EEUU) con una organización terrorista", aseguró Erdogan en un discurso hoy, recogido por los medios locales.
"Le dije lo mismo a (el presidente ruso, Vladímir) Putin: tampoco nos asociaremos por Rusia. Todas las informaciones que nos han llegado hasta ahora (respecto a la alianza de EEUU con el YPG) las quiero ver en el nivel de rumores. Pienso que esta visita será un punto de inflexión", dijo el presidente turco.
En otro momento del discurso, recogido por el diario Hürriyet, Erdogan aseguró que su entrevista con Trump, la primera entre los dos mandatarios, "no se situará en un nivel de coma, sino de punto".
Le restó importancia a la decisión de la Administración de Trump de apostar por las milicias kurdas al señalar que "América (EEUU) se vive ahora mismo un proceso de transición" y que "hay varios asuntos que vienen de antes".
El apoyo armamentístico al YPG no son armas ligeras sino pesadas. Eso desde luego es algo que va en contra de nuestra relación estratégica y nuestros acuerdos con Estados Unidos. Por supuesto es algo que no deseamos en absoluto. Lo expresaremos, lo hablaremos", dijo Erdogan.
El presidente turco viajará a China este domingo, donde se entrevistará con el presidente chino, Xi Jinping, y el lunes se dirigirá directamente a Washington.