Al menos 150 alcaldes que representan a 47 millones de estadounidenses entre ellos los de Nueva York, Los Ángeles, Boston, Houston, Seattle o Chicago aseguraron en un comunicado conjunto que cumplirán los compromisos del acuerdo de París.
"El mundo no puede esperar, y nosotros tampoco", dijeron.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, dijo a la radio WNYC que quería "superar" su compromiso de reducir las emisiones en 80% para 2050.
Las promesas de Washington en el acuerdo de París dependen en gran medida de reglamentaciones locales.
Robert Orr, uno de los arquitectos del acuerdo de París y exconsejero especial del secretario general de la ONU sobre el cambio climático, dijo a la AFP que Estados Unidos ya estaba en camino para lograr la mitad de su compromiso asumido en la capital francesa.
"Lo que está realmente sucediendo es que el presidente, sin querer, puede haber dado dinamismo a los mismos actores que siempre han sido los que han reducido las emisiones, a que hagan más por sí mismos", dijo Orr, ahora decano de la facultad de políticas públicas de la Universidad de Maryland.
"Si esta coalición se amplía y profundiza al ritmo que parece, creo que el efecto Trump puede ser más que mitigado", estimó.
La alcaldesa demócrata de Salt Lake City (Utah), Jackie Biskupski, confirmó que se había unido a la coalición de Bloomberg.
El año pasado su ciudad se comprometió a un 100% de energía renovable para 2032 y a una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de 80% para 2040.
"Debemos liderar donde la Casa Blanca se niega a hacerlo", dijo.
Los gobernadores de Hawaii, Colorado, Oregon, Pensilvania, Virginia, Minnesota y Alaska defendieron en comunicados la energía limpia. Los gobernadores de Delaware y de Ohio, un republicano, criticaron la decisión de Trump.
Inclusive pesos pesados de la industria petrolera estadounidense como ExxonMobil y Chevron manifestaron que seguirán apoyando el acuerdo de París.
El gerente ejecutivo de la gigante General Electric, Jeff Immelt, llamó en Twitter a la industria a "liderar y no depender de un gobierno", mientras General Motors aseguró que sigue defendiendo públicamente "la acción y la toma de conciencia sobre el planeta".