Esta semana se conocerá el destino de la cuenta de Facebook del expresidente Donald Trump, una decisión que despertará fuertes sentimientos sea cual sea el camino.
El Político
En ese sentido, la Junta de Supervisión de la red social anunció que dará a conocer su decisión el miércoles sobre un caso relacionado con el ex presidente.
Vale recordar que la cuenta de Trump fue suspendida por incitar a la violencia que condujo a los mortales disturbios del 6 de enero en el Capitolio.
Después de años de tratar la retórica incendiaria de Trump con un toque ligero, Facebook e Instagram silenciaron sus cuentas el 7 de enero.
La plataforma preferida de Trump
Alegaron en ese momento que estaría suspendida "al menos" hasta el final de su presidencia.
Aunque Trump publicaba a menudo en Facebook , su plataforma preferida fue siempre Twitter.
Pero Twitter lo vetó permanentemente, sin una junta de supervisión a la que patear la decisión final.
Aunque no siempre tan destacados como en Twitter, las publicaciones de Trump en Facebook fueron ampliamente compartida.
Así ocurrió con las de sus partidarios conservadores, como Ben Shapiro y Dan Bongino, que siguen acumulando millones de visitas y comentarios.
En Twitter, mientras tanto, el presentador de Fox News, Tucker Carlson, parece estar asumiendo el papel de provocador conservador en jefe en el vacío dejado por Trump.
Laurence Tribe, miembro del Real Facebook Oversight Board, un grupo crítico con Facebook y su panel dijo que "si lo reintegran, Facebook afirmará que esto demuestra la independencia del Consejo".
Si no lo hacen, -agregó-Facebook dirá que su decisión de excluir a Trump fue reivindicada. Si sale cara ganan, si sale cruz perdemos.
Los periodistas deberían saber que no hay que tomarse en serio este escaparate", dijo el también profesor de la Facultad de Derecho de Harvard.
Facebook creó el panel de supervisión para dictaminar sobre contenidos espinosos en sus plataformas.
Ello se produjo en respuesta a las críticas generalizadas sobre su incapacidad para responder con rapidez y eficacia a la desinformación, el discurso de odio y las nefastas campañas de influencia.
Hasta ahora sus decisiones se decantaron por la libertad de expresión frente a la restricción de contenidos.