Aprovechando la liquidez en dólares que recuperó el sistema bancario local tras el final del cepo -y que se amplió marcadamente por el blanqueo-, y previendo que el "efecto Trump " puede complicar su estrategia de financiamiento del déficit -volcada hacia el mercado internacional-, el Gobierno logró reabrir una puerta al obtener dólares de la banca local, opción que había quedado sellada hace 15 años.
Lo hizo al aprobar el directorio del Banco Central (BCRA) una adecuación a las normas de crédito en dólares e incluir en ella un inciso que habilita a los bancos a comprarle al Tesoro nacional los bonos de deuda en moneda extranjera que emita por un total que no supere la mitad del monto total en préstamos que tengan concedidos al sector privado.
La norma, Comunicación "A" 6105, implica que los bancos vuelven a quedar habilitados a destinar parte de los dólares captados como depósitos al sector privado a financiar al Tesoro nacional, algo que hasta aquí, y tras las dolorosas lecciones que dejó la explosión de la convertibilidad, les estaba vedado.
El Gobierno reabrió una opción local para financiarse en dólares
El Gobierno reabrió una opción local para financiarse en dólares. Foto: Archivo
Ocurre que, para evitar el descalce de monedas, desde 2002 los bancos sólo podían usar los depósitos en dólares para dar crédito a empresas exportadoras, es decir, con capacidad de generación propia de divisas, aunque manteniendo un alto nivel de encajes.
Luego el posible destino de los denominados "argendólares" se amplió hace unos años a las firmas proveedoras de exportadores y, desde la semana pasada, se agregó a los productores agropecuarios para que puedan financiar la compra de maquinaria agrícola o sistemas de riego, aun cuando no sean exportadores directos.
Pero la novedad mayor que trajo la reforma es la posibilidad de que los bancos puedan volver a suscribir emisiones primarias de instrumentos de deuda pública nacional en dólares, como lo hicieron -hasta el exceso- en la década del 90.
Para tratar de evitar esta traumática experiencia, la circular impone una serie de restricciones a estas compras. La más importante es que los bancos sólo podrán utilizar un dólar para adquirir en bonos por cada 2 dólares que hayan transformado en créditos a empresas.
"Es una forma de fijar un límite claro y a la vez evitar el riesgo de recaer en crowding out", explicaron en el BCRA, en alusión a un posible desplazamiento de la oferta crediticia en favor del sector público que lleve a los bancos a desatender la demanda crediticia de empresas.
Además, se mantienen en pie las normas de fraccionamiento que limitan la exposición de la banca al sector público. Todo esto hace que, aunque hoy el sistema cuenta con US$ 27.100 millones en depósitos, como sólo tiene prestados a privados menos de US$ 9000 millones, en teoría quedaría habilitado para comprarle al Gobierno unos US$ 4500 millones en títulos de deuda. Pero, dados el nivel de encajes y el resto de las normas, ese monto se reduce a unos US$ 3500 millones, según estimaciones de mercado.
La flexibilización llega cuando el sistema tiene "unos US$ 10.000 millones ociosos, estimó días atrás el presidente del BCRA, Federico Sturzenegger, por la aceleración que mostraron los depósitos en dólares privados (sumaron US$ 4200 millones este mes) por el blanqueo. Pero también apunta a dejar abierta una opción de financiamiento local en dólares en caso de que el clima financiero global se pudiera deteriorar más en los próximos meses.
Pero provoca dudas en el mercado, dado que hay quienes creen que la decisión "se enmarca en una tendencia reciente que no contribuye a generar una mayor percepción de independencia del BCRA ni ayuda a reducir el temor a una creciente dominancia fiscal", apunta Hernán Hirsch, de la consultora FyE. El economista alude a "la renovación del programa de crédito productivo con rebaja de tasa y ampliación de cupo; la ampliación del Ahora 12 a Ahora 18 y las sucesivas bajas de tasas con fundamentos difusos" como "señales" que darían cuenta de un giro en las políticas del BCRA.
Con información de La Nación