La Comisión Nacional de Justicia y Paz, que depende de la Conferencia Episcopal Argentina, repudió el daño que causa el narcotráfico en el país y pidió que se esclarezca la muerte de un cura conocido por sus denuncias contra el crimen organizado, que apareció ahorcado hace un mes.
"El narcomenudeo cuestiona la cultura del trabajo y las drogas afectan gravemente la salud de muchos niños y jóvenes", señaló el organismo en un comunicado en el que denunció que el narcotráfico mueve "grandes cantidades" de dinero que está "manchado con sangre", sobre todo, la "de los pobres".
El texto fue difundido cuando se cumple un mes desde que el sacerdote de 45 años Juan Viroche, conocido en la norteña provincia de Tucumán por su lucha contra bandas de narcotraficantes, apareciera ahorcado en la iglesia a la que estaba adscrito, Nuestra Señora del Valle, en La Florida.
Los vecinos de la localidad, que desde que se conoció la noticia se movilizaron en numerosas ocasiones para pedir justicia, rechazan que se trate de un suicidio, que fue la primera sospecha que tuvo el fiscal, y piden investigar la verdad del caso.
"Se enfrentó con valentía a las mafias que manejan el narcotráfico, y que lo habían amenazado a él y a otras personas de su comunidad", reza el texto.
Para la entidad, que está compuesta por sacerdotes, religiosos y laicos, esta "trágica muerte" puso de manifiesto una situación de "inusitada e intolerable gravedad" y las circunstancias en las que tuvo lugar "deben ser esclarecidas por la Justicia".
"Queremos hacer llegar nuestra palabra de cercanía y aliento a esa comunidad herida por la muerte de su pastor y antes de eso, por el daño que causan en ella la droga, el crimen y la corrupción", agregó el organismo de la Conferencia Episcopal argentina.
Además, destacó el trabajo que realizan numerosas organizaciones y "personas de buena voluntad" para ayudar a quienes "sufren las consecuencias de este tráfico ilegal" y advirtió que deberían tener un "importante apoyo" tanto de los organismos del Estado como de la sociedad en su conjunto.
"Urge que las fuerzas policiales y de seguridad y los organismos en que se hayan infiltrado los intereses del narcotráfico, sean depurados", afirmó antes de hacer hincapié en la necesidad de "no perder de vista a las víctimas" de aquellas mafias que, a su juicio, se "lucran con la muerte" y "no dudan en amenazar o incluso matar a aquellos que consideran un obstáculo a sus mezquinos intereses".
Con información de EFE