El ministro de Defensa de Israel, Avigdor Lieberman, ha aprobado la entrada de cien mil palestinos de Cisjordania en Israel y Jerusalén Este en los próximos días con motivo de la festividad musulmana de Eid Al Adha, informó hoy el Ejército israelí.
La oficina del Coordinador de Actividades del Gobierno en los Territorios (COGAT, organismo militar que gestiona la ocupación) informó hoy de diversas medidas que llevará a cabo durante las festividades (entre los días 12 y 16 de este mes) “como parte de las políticas para mejorar las vidas de los civiles palestinos residentes” en Cisjordania y para “acomodar la libertad religiosa”.
“Se coordinarán 100.000 visitas familiares” de Cisjordania a Israel, así como “viajes al extranjero por el aeropuerto de Ben Gurión” (cerca de Tel Aviv y vetado habitualmente a los residentes de Cisjordania), y miles de permisos para que los musulmanes puedan ir a rezar a la mezquita de Al Aqsa, en la Ciudad Vieja de Jerusalén, ocupada por Israel en la Guerra de los seis días de 1967.
Además, también se permitirá la llegada, coordinada previamente, de visitantes del extranjero a Cisjordania y de visitas familiares a través del puesto fronterizo entre Jordania y Cisjordania del puente Allenby (bajo control de Israel) y se darán permisos de entrada a residentes en Gaza de más de sesenta años para que acudan a rezar a Al Aqsa.
“El COGAT ha informado a los oficiales de la Autoridad Palestina y de la comunidad internacional sobre las medidas y el reconocimiento de la festividad” y “ha informado a sus fuerzas de seguridad sobre las tradiciones y rituales de estas vacaciones”, añade la nota militar.
El Eid al Adha o “fiesta del sacrificio” rememora la muerte que la historia del profeta Abraham, quien mató a un cordero en lugar de a su propio hijo Ismael, según relata el Corán.
Con información de EFE