La salida del ministro de Justicia incrementa el riesgo de un nuevo juicio político en Brasil, donde hay precedentes históricos de líderes derrocados en tiempos de epidemia, como el de Collor de Mello, destituido tras un brote de cólera, y Dilma Rousseff, tras una epidemia del virus del Zika.
El tema se ha convertido en la agenda del día en las noticias brasileñas, tal como ocurrió con Dilma Rouseff hace cinco años. Comprende cómo ocurre y las posibilidades reales de su efectividad en el escenario actual.
Ahora que el apoyo al aguerrido presidente populista ha disminuido debido a su manejo de la pandemia y la especulación de que otros ministros también podrían renunciar, el fiscal general del país ha abierto una investigación sobre las acusaciones de Moro de interferencia política. Bolsonaro ha dicho que las acusaciones son infundadas.
El público aún recuerda bien la destitución de Dilma Rousseff, y esta crisis plantea la posibilidad de un segundo juicio político a un presidente en la democracia más grande de América latina en un plazo de cinco años.
"Las acusaciones hechas por Moro son muy serias", dijo Joice Hasselmann, una diputada que se distanció de Bolsonaro el año pasado y quiere que Moro sea elegido presidente en 2022. "Refuerzan los llamados para el juicio político de Bolsonaro"
Un juicio político contra el Presidente o cualquier funcionario público es posible en Brasil, pero igual que el Impeachment de los Estados Unidos, la ceremonia es tan larga que termina en una gran pérdida de tiempo.
Apuesta a la economía
La salida de Bolsonaro, adem{as de política es económica, mediante un audaz plan inspirado en la famosa Escuela de Chicago y llevado adelante por su ministro de finanzas.
El ministro de Economía de Brasil, Paulo Guedes, auguró este lunes una pronta recuperación de la actividad productiva, y defendió la forma en la que el Gobierno de Jair Bolsonaro ha decidido enfrentar la pandemia de coronavirus, a pesar de que el país registra más de 4.500 fallecidos por la enfermedad y la cantidad de contagios supera los 66.000.
En un acto oficial luego de una reunión de Gobierno en el Palacio de la Alvorada, en Brasilia, Guedes se distanció de otros países de la región que, a diferencia de Brasil, sí han aplicado medidas de aislamiento general para evitar la propagación del virus.
"No seremos Argentina ni Venezuela, estamos en otro camino, el camino de la prosperidad, no en el camino de la desesperación", afirmó el ministro, acompañado por Bolsonaro. Y agregó que su país "va a sorprender al mundo con la recuperación económica".
El funcionario prometió subir los salarios con aumento de la productividad, y dijo que el Gobierno está "privatizando, abriendo la economía y aumentando las inversiones".
Guedes está alineado con el jefe de Estado brasileño, quien ha omitido hasta ahora las recomendaciones de los organismos de salud internacionales respecto a la aplicación del aislamiento social obligatorio para evitar el contagio masivo.
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Concretamente, Bolsonaro ha decidido mantener las actividades sin restricciones, a fin de evitar consecuencias económicas y pérdidas de empleo. Su posición le ha llevado a una crisis política dentro de su propio Gobierno, tras la destitución del exministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, quien abogaba por la disposición de una cuarentena en todo el territorio.
Firme en su postura, la semana pasada Bolsonaro volvió a cuestionar las medidas de aislamiento social aplicadas de manera unilateral por los gobernadores, al asegurar que como "el 70 % de la población" contraerá la enfermedad, "no tiene sentido querer huir de ella".
No está claro cuándo se completará el informe del fiscal general sobre las acusaciones de Moro, lo cual es una posible base legal para cualquier proceso de juicio político. Para que Bolsonaro sea sometido a juicio político, la mayoría de los miembros del Congreso y del Senado tendrían que votar a favor de su destitución. Ha estado perdiendo apoyo en el Congreso, pero está intentando recuperarlo, según fuentes en el Congreso. El portavoz de la Cámara Baja, que debe iniciar el proceso, podría esperar para ver si Bolsonaro se debilita aún más antes de proceder, añaden.
Según explicó el doctor Henrique Araújo
Para que se lleve a cabo el procedimiento de juicio político, se deben cumplir los requisitos y acontecimientos previstos en la ley de juicio político (ley 1079 de 1950).
Todas las quejas deben formalizarse para el inicio del procedimiento y por esa razón, publicaciones sensacionales o páginas de dudosa credibilidad no son suficientes, explica el abogado brasileño Henrique Araújo.
"El presidente está cavando su propia tumba. Que renuncie antes de que lo destituyan; así nos puede salvar del coronavirus y de un largo proceso de juicio político", dijo el ex presidente Fernando Henrique Cardoso.
Si sucede, el vicepresidente asumirá el cargo y no el segundo lugar en las elecciones; y el vicepresidente no será nombrado presidente si también es el blanco de la acusación En nuevas elecciones, hasta la mitad del primer mandato habrá una nueva elección de la manera tradicional. A partir de la segunda mitad del período, la elección será indirecta, es decir, quién votará es solo el pueblo del Congreso y no el pueblo en sí (aunque representan la voluntad del pueblo.
Mientras dure el procedimiento de elección para el nuevo presidente, quien asuma la presidencia momentáneamente sería el tercero en la línea de sucesión, en este caso, el presidente de la Cámara de Diputados.
Creo que algunas observaciones son importantes:
La acusación no se establece a través de una petición, Este es un procedimiento muy serio y necesita un proceso completo. Sin embargo, cualquier persona (usted o yo) puede presentar una queja, siempre que se les proporcione evidencia objetiva basada en 1079 c / co art. 85 del CF – e intente instituir el procedimiento de juicio político.
En este caso, el presidente de la Cámara de Diputados analizará la queja y, si la aprueba, creará una comisión especial para evaluar la solicitud en detalle.
Cualquier ciudadano – que esté al día con sus obligaciones electorales – (bajo los términos de la ley de destitución Arts. 14 , 41 y 75 ) tiene derecho a presentar una queja proponiendo la destitución del presidente allí en la Cámara de Diputados.
Formalizar una queja es más factible que simplemente hacer una panorámica, las personas realmente pueden hacer valer sus derechos, pero lo hacen mal. Mira, estamos hablando de un ciudadano individualizado y determinado y no de un colectivo.
Entonces, de manera simplificada, estas son las etapas iniciales de juicio político aún en la Cámara de Diputados (corrobora a Cretella Jr.): primera queja formalizada con la presentación de los hechos (que cualquier ciudadano puede formalizar); 2º Recibo de la denuncia por parte de los representantes de las personas en la cámara; 3er Análisis de la denuncia en la Cámara de Diputados; 4º Opinión de la cámara sobre la queja y finalmente 5º – Discusión sobre la aprobación o rechazo de la queja.
Si el proceso aun sigue adelate
La sesión del Senado está presidida por el presidente y ministro del STF debe llevarse a cabo dentro de los 180 días de su llegada al Senado. Con sus 2/3 votos allí, llegando a su fin y la sentencia favorable, ocurrirá la destitución y el actual presidente dará paso a otro.
Se este modo, igual que con el spechmente de los estados unidos, el Senado termina convirtiéndose en un tribunal competente especial para juzgar este procedimiento. Vemos aquí una unión real entre el poder judicial, en el papel del ministro STF que preside la sesión, junto con el veredicto de los senadores, representantes legítimos de los Estados Federados y, en consecuencia, del pueblo, a través de la legislatura.
Según el Art. 68 de la ley de juicio político , la sentencia será la siguiente: el presidente de la STF preguntará a los senadores que responderán "sí" o "no" a la siguiente pregunta formulada por el presidente: "El acusado cometió F ¿El delito del que se le acusa y debe ser sentenciado a la pérdida de su puesto? "
También se debe tener en cuenta que el presidente que sufre un juicio político no solo pierde su posición. Además de esto, existen otras consecuencias, como, por ejemplo, la descalificación durante ocho años para ejercer la función pública, sin perjuicio de las demás sanciones judiciales aplicables.
No solo el presidente puede ser acusado. Como ejemplo: gobernadores, alcaldes, ministros de STF, PGR, AGU también pueden. SI realmente quiere ver la acusación contra el Presidente o su gobernador, alcalde y los demás responsables del procedimiento, siga el procedimiento de la ley y formalice su queja.
Todos los detalles se pueden encontrar en la ley de juicio político , a saber: http://goo.gl/LchCxB
