Es un medio de transporte personal que permite cumplir el distanciamiento social y que solo tiene dos puntos de contacto físico –en el manubrio–, a diferencia del interior de un bus, donde hay más de treinta superficies de contacto: puertas, pasamanos, asientos, respaldares, monedas, billetes, barandas y otros pasajeros.
El Político
La bici-popular diseñada en el Perú ya está lista
Hacen falta doce kilos de acero, dos ruedas de caucho y una cadena de transmisión para poder mover a una persona de hasta 130 kilos con el simple esfuerzo de estar caminando. Una bicicleta es capaz de trasladarnos sin quemar combustible, reduciendo riesgos de contagio y a unos 17 km/h, es decir, más rápido que un automóvil en hora punta en Lima.
La fabricación en serie de este prototipo aprobado estará en manos de ensambladores peruanos que serán favorecidos por esa iniciativa empresarial, de cara a la reactivación económica post-pandemia.
Es uno de los medios de transporte más antiguos de la historia, que se ha convertido mundialmente en el vehículo del futuro contra la pandemia.
Una bicicleta es eficaz para evitar contagios e impedir la propagación del Covid-19, un virus que llegó al Perú en avión, viajó en combi e hizo transbordo en el tren eléctrico, esparciéndose por cada esquina. El coronavirus no viaja en bicicleta.
El Perú fue el noveno país del mundo en declarar la bicicleta como medio de transporte para frenar el contagio. El primer paso del gobierno peruano fue diseñar un modelo peruano a bajo costo con las mínimas condiciones de seguridad para circular por la ciudad.
Un modelo equivalente al Volkswagen Escarabajo en Alemania de los años 30, pero de dos ruedas. La fabricación estará en manos de un gremio de ensambladores peruanos que serán favorecidos por esa iniciativa empresarial, de cara a la reactivación económica post-pandemia.
El coronavirus empuja a la bicicleta a una nueva edad de oro
Las tiendas registran incrementos de la demanda del 300% y muchas agotaron su stock en junio. «Nunca se había oído hablar tanto de la bici», explican desde el sector, que se ha recuperado tras el confinamiento «en forma de V perfecta»
Si el coronavirus ha reforzado a un medio de transporte, ese es sin duda la bicicleta. Los velocípedos de dos ruedas han cobrado un protagonismo inédito en calles y caminos tras el confinamiento. Un nuevo incentivo para este tipo de vehículos, que ya registraban incrementos significativos de sus ventas en los últimos años, fruto también de una mayor conciencia ambiental y las facilidades puestas en marcha por los Ayuntamientos para fomentar su uso.
«Hay razones para ver el futuro con mucho optimismo», asegura Iñigo Isasa, presidente de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE), que agrupa a 38 fabricantes, comercializadores y distribuidores.
«Nunca había oído hablar tanto de la bicicleta, que incluso ha estado abriendo las noticias deportivas en todos los canales de televisión», dice. Tal es su auge, que la Fundación del español urgente, Fundéu, ha constatado la aparición de un nuevo vocabulario entorno a la bicicleta, formado por neologismos como «bicisendas» o «ciclorrutas».
Picos del 300%
En los últimos meses los puntos de venta han registrado picos de demanda del doscientos o incluso el trescientos por ciento en comparación con el año pasado. Más de una tienda ha llegado incluso a agotar su stock totalmente a lo largo del mes de junio. El sector habla ya de una recuperación «en V perfecta, con el segundo pico por encima del primero», en palabras de Carlos Núñez, co portavoz de la Mesa Española de la Bicicleta.
«Tras el confinamiento mucha gente quiere disfrutar del aire libre», asegura Núñez, también secretario general de AMBE. Pero su despertar comenzó antes de la pandemia. El año pasado, la facturación del sector, incluyendo la venta de cascos, accesorios y productos textiles, creció un 9,27%, hasta los 1.871 millones de euros, mientras que las ventas de bicicletas alcanzaron las 1.261.283 unidades, tras incrementarse un 20,41%. Hay más de 190 fabricantes nacionales, que emplean, junto a la distribución y los recambios, a 22.567 personas.
Durante el confinamiento, numerosas administraciones locales han optado por trazar carriles temporales para las bicicletas, o ampliar la red ya existente. La DGT la ha promocionado como medio idóneo para los desplazamientos urbanos. Y el Gobierno ha optado por subvencionar, dentro de la segunda edición del Plan Moves, la creación de sistemas de préstamos de bicicletas eléctricas.
Madrid, por ejemplo, acaba de inaugurar la primera de las nuevas estaciones de su servicio Bicimad, en lo que supondrá su expansión más ambiciosa desde el lanzamiento del servicio, en 2014. Bilbao, como otros muchos ayuntamientos, pondrá en marcha medidas para facilitar que los usuarios de bicicletas puedan utilizarlas de forma sencilla para complementar su viaje en transporte público, lo que los expertos denominan intermodalidad.
De forma paralela, la reducción de la velocidad en las vías urbanas a 30 kilómetros por hora ha impulsado que muchos usuarios pierdan el miedo a compartir espacio sobre el asfalto con el coche y la moto. Y en Valencia incluso se ha propuesto un incentivo de 360 euros al año para quién vaya a trabajar en bicicleta. «La pandemia ha sido un momento oportuno para reflexionar sobre los usos del espacio público», consideran desde los ayuntamientos.
Ahorrar haciendo ejercicio
Pero también hay un argumento económico, ya que la bicicleta supone un ahorro respecto a otras formas de transporte. Se calcula que, por cada 1.000 kilómetros, una bicicleta eléctrica apenas supone un euro en la factura eléctrica (frente a los 85 euros que puede suponer en un coche de combustión), un argumento que puede pesar mucho ante el incierto panorama económico.
La bici peruana
El objetivo de la Autoridad del Transporte (ATU), encargada de promover el uso de la bicicleta en el Perú, fue diseñar una unidad con materiales de calidad, de alta durabilidad y a bajo costo. El prototipo aprobado tiene la capacidad de adaptarse a mujeres y varones. Cuenta con luces, casco, una parrilla unida al chasis y otra parrilla desmontable. Tiene una tubería de 1,5 pulgadas, frenos v-brake de aluminio, aros doble pared, eje central de rodaje, radios de acero inoxidable y asiento ergonómico.