Las autoridades de la Reserva Federal (FED) comenzaron a reconocer que están más cerca iniciar un debate sobre la fecha para retirar parte de su apoyo a la economía estadounidense; incluso cuando dicen que el respaldo aún es necesario para impulsar la recuperación y el empleo.
El Político
Por una parte, la presidenta de la FED en San Francisco, Mary Daly, se refirió en declaraciones a la cadena CNBC a la posibilidad de un recorte a la compra mensual de activos por 120.000 millones de dólares. “Estamos hablando sobre reducción”, señaló la funcionaria.
El objetivo de la compra de bonos y de las tasas de interés cerca de cero es reducir los costos de los préstamos y fomentar la contratación y la inversión. Daly aclaró que no se trata de una medida inmediata; y aunque se mostró optimista sobre la caída del desempleo resaltó que la economía todavía está a más de 8 millones de puestos de trabajo de donde estaba antes de la pandemia.
“En este momento, la política monetaria está en un muy buen lugar… tenemos que ser pacientes”, enfatizó la presidenta de la Fed de San Francisco citada por la agencia Reuters en nota publicada por El Economista.
Las puertas se abren
Por otro lado, el vicepresidente de la FED, Richard Clarida, también planteó la posibilidad de hablar sobre una reducción al respaldo de la Reserva Federal en algún momento.
“Bien puede ser que llegue un momento en las próximas reuniones”, dijo citado por El Economista.
Desde la reunión de abril dos presidentes de bancos regionales de la FED han instado públicamente a que la discusión comience pronto. Otros se han mostrado preocupados por los riesgos que una ronda de aumento de precios se convierta en un ciclo de inflación más arraigado.
Las autoridades de la FED prometieron avisar a los mercados con suficiente antelación antes de realizar cambios a la política monetaria; esto con el fin de evitar que se repita el repunte de los rendimientos de los bonos después de que el expresidente de la FED, Ben Bernanke, sorprendiera a los mercados al señalar una reducción de la compra de bonos en el 2013.
La próxima reunión del banco central será el próximo 15 y 16 de junio. La FED prometió que no subirá las tasas hasta que la economía vuelva al pleno empleo, la inflación alcance 2% y se encamine a superar ese nivel.
La FED frente a la inflación
Richard Clarida también dijo que la FED puede frenar un brote de inflación en caso de que ocurra, sin desviar el camino de la recuperación. Además, se mostró confiado en la capacidad del banco central para diseñar un “aterrizaje suave” si los precios continúan escalando más allá de lo previsto.
“En el caso en el que estas presiones sean más persistentes y pongan en riesgo nuestro mandato de estabilidad de precios, lo reconoceremos y a través de nuestras comunicaciones y nuestras herramientas creo que podremos compensar eso de una manera que respalde el mantenimiento de la recuperación económica”, señaló el vicepresidente de la FED citado por Reuters.