La guerra que se desató con la invasión de Rusia a Ucrania ha generado una serie de consecuencias económicas palpables y una de ellas podría ser ahora el aumento de precios de los carros, así como la escasez.
El Político
BMW detuvo la producción en dos fábricas alemanas. Mercedes está ralentizando el trabajo en sus plantas de ensamblaje. Volkswagen, alertando de paradas de producción, busca fuentes alternativas de repuestos.
Durante más de un año, la industria automotriz mundial ha luchado con una escasez desastrosa de chips de computadora y otras piezas vitales que ha reducido la producción, ha retrasado las entregas y ha disparado los precios de los automóviles nuevos y usados más allá del alcance de millones de consumidores.
Ahora, un nuevo factor, la guerra de Rusia contra Ucrania, ha presentado otro obstáculo. El cableado eléctrico de importancia crítica, hecho en Ucrania, está repentinamente fuera de alcance.
Con una alta demanda de los compradores, materiales escasos y la guerra causando nuevas interrupciones, se espera que los precios de los vehículos suban aún más hasta bien entrado el próximo año.
Más consecuencias
El daño de la guerra a la industria automotriz ha surgido primero en Europa. Pero es probable que la producción de EE. UU. también sufra eventualmente, si se interrumpen las exportaciones rusas de metales, desde paladio para convertidores catalíticos hasta níquel para baterías de vehículos eléctricos.
“Solo necesita perder una parte para no poder hacer un automóvil”, dijo Mark Wakefield, codirector de la unidad automotriz global de la consultora Alix Partners. “Cualquier bache en el camino se convierte en una interrupción de la producción o en un aumento de costos no planificado”.
Los problemas de suministro han acosado a los fabricantes de automóviles desde que estalló la pandemia hace dos años, en ocasiones cerrando fábricas y provocando escasez de vehículos. La sólida recuperación que siguió a la recesión hizo que la demanda de automóviles superara ampliamente la oferta, un desajuste que hizo que los precios de los vehículos nuevos y usados se dispararan mucho más allá de la alta inflación general.
Fuente: AP News