Italia se despidió a lo grande, este miércoles, del ex primer ministro Silvio Berlusconi. Le hicieron un funeral de Estado en la catedral de Milán con asistencia de miles de personas y los más altos responsables políticos del país. Fue un líder carismático amado por uno y odiado por otros. Ahora deja un vacío en el rompecabezas de la política italiana.
El Político
Las exequias estuvieron presididas por el arzobispo de Milán, monseñor Mario Delphini. Berlusconi falleció el lunes, a los 86 años, debido a una leucemia contra la cual luchó en los últimos años.
Su partida deja un vacío. ¡Y esta no es sólo una frase luctuosa! Aunque el peso de Silvio Berlusconi en la vida política italiana había mermado en los últimos años, su partido, Forza Italia, siempre funcionó para inclinar la balanza o para equilibrarla.
De hecho, la organización política que él lideraba se considera crucial, según un reporte de AP, para la salud del gobierno de derecha encabezado por la premier Giorgia Meloni. A ella se le vio llorosa y preocupada durante las honras fúnebres.
#EnDirecto ▶ Funeral de Silvio Berlusconi en Italia https://t.co/9ZHK9B1rTx
— EL MUNDO (@elmundoes) June 14, 2023
Desde el lunes, el féretro del magnate, quien falleció en el hospital San Raffaele, se expuso en su Villa San Martino de Arcore, una localidad cerca de Monza, al norte de Milán. Por allí también desfilaron personalidades destacadas de la vida italiana en todos los ámbitos.
Cabe recordar que Berlusconi no sólo fue un político, sino también un hombre de negocios multimillonario. La magnitud de su fortuna lo llevó a estar en el famoso ranking de la revista Forbes. La publicación actualizó los datos del magnate en abril pasado y estimó que había logrado acumular una riqueza de 6.400 millones de euros (6.900 millones de dólares).
Forza Italia sin Berlusconi
La supervivencia del partido Forza Italia, de la cual algunos dudan ahora que ya no está su figura central, es motivo de debate. Pero no se trata abiertamente, sino en forma de rumor en los pasillos del parlamento. También se aborda de forma tangencial en las páginas interiores de los periódicos.
Sin embargo, el segundo hombre fuerte de la organización política, el canciller Antonio Tajani, declaró el lunes: “Tenemos el deber, como Forza Italia, de seguir adelante, y lo haremos”.
Pero la tarea no luce tan fácil y es que el partido fue creado en 1994 por Berlusconi a su imagen y semejanza. Su fallecimiento lo vuelve vulnerable.
"Siempre vivirás dentro de nosotros": el mensaje de despedida firmado por los cinco hijos de #Berlusconi, publicado hoy en los principales periódicos italianos.#Italia
Te lo estamos contando en @cope y @TRECE_es pic.twitter.com/BXcoPD3EIQ— Eva Fernández (@evaenlaradio) June 14, 2023
Los desvelos de Meloni
El 8% que representa Forza Italia dentro del panorama general es necesario para que Meloni tenga estabilidad. Ella necesita sus votos en el Senado y en la cámara.
“Si el Partido sigue en pie, el gobierno está bien. Pero si el partido empieza a desintegrarse, hay que ver a dónde irá esta gente”. El señalamiento lo hizo el experto en ciencias políticas Roberto D’Alimonte, quien escribe en Il Sole 24 Ore.
De aquellos tiempos en los que Forza Italia ganó la mayor cantidad de votos para darle a Berlusconi su primer período como primer ministro queda poco. Tampoco se parece a la organización que nuevamente lo llevó a ganar en 2001 con el 29,4% de los votos y en 2008 con el 37,4%.
Su último gobierno cayó en 2011, cuando la crisis de deuda lo obligó a renunciar y lo sucedió un gobierno de tecnócratas. Luego fue condenado por fraude fiscal en 2012.
A pesar de esos reveses y de los múltiples escándalos que protagonizó por ser amante de mujeres mucho más jóvenes que él, o por sus polémicas fiestas, Silvio Berlusconi nunca le fue indiferente a la sociedad italiana. Ya fuera para rechazarlo o para justificarlo, se mantuvo siempre entre los temas de debate.
En Forza Italia contaba con la lealtad a toda prueba de un grupo estrecho de colaboradores políticos y empresariales. Pero tal vez su mayor patrimonio político estaba en la base. Lo cierto es que nunca confió en alguien para designarlo como heredero político.
Esa falta de un heredero designado por el líder es lo que puede echar abajo lo que queda de Forza Italia, donde ya se habla de luchas por la conducción del partido y de divisiones.