Ya se están administrando las primeras dosis de la vacuna contra el coronavirus en las comunidades indígenas americanas. El gobierno federal y los estados tratan de proteger a una de las poblaciones estadounidenses más vulnerables. ¿La causa? El COVID-19 devastó las tribus indígenas americanas…
El Político
Desde las tierras altas del desierto de Nuevo México hasta la tribu de pescadores costeros en las afueras de Seattle, el gobierno de Trump planeó vacunar a todos los indígenas que viven en EE.UU. El objetivo es proteger a una de las poblaciones estadounidenses más vulnerables.
Cabe destacar que en marzo de 2020 se conoció que el del pueblo Navajo tuvo una tasa de infecciones por Covid-19 casi equivalente a la de Nueva York.
No obstante, los servicios de salud disponibles para estos nativos americanos son insuficientes. Según EuroNews aproximadamente 12 centros médicos se pierden en medio de un vasto territorio de 71.000 kilómetros cuadrados. El mismo se extiende a lo largo de varios estados: Nuevo México, Utah y Arizona.
Dentro de la reserva del pueblo Navajo, el primer caso de infección por coronavirus fue detectado el 17 de marzo. 40 días después el número superó 1.280 personas infectadas, y hubo más de 50 fallecidos.
Ahora, la administración de Trump decidió hacer un esfuerzo doble para vacunar a los primeros pobladores de EE.UU. incluye una operación logística masiva por parte del Servicio de Salud Indígena del gobierno federal.
El mismo se enfoca en vacunar a los trabajadores de la salud en clínicas de naciones indígenas soberanas en todo el país y clínicas urbanas que atienden a nativos americanos fuera de las reservas, reportó Local 10.
La vacuna llegó el lunes a la nación Navajo de EE.UU.
La asignación inicial de la agencia de alrededor de 22.000 dosis de vacunas de Pfizer y BioNTech de Alemania llegó el lunes a los centros de distribución de la Nación Navajo en Arizona y Nuevo México y en lugares urbanos como Phoenix. En esos lugares, cientos de trabajadores de la salud cuidan a los nativos americanos, y este jueves empezaron a vacunarlos.
Pero muchas tribus seleccionaron una ruta separada para recibir entregas de vacunas a través de agencias de salud estatales que en algunos casos tienen relaciones más duraderas y de confianza con las comunidades tribales. Ese sistema está impulsando las vacunas a tribus pequeñas como Acoma Pueblo, conocida por su “ciudad del cielo” en la cima de la mesa en el desierto de Nuevo México.
Han muerto muchos nativos por el COVID-19
Los nativos americanos han enfermado y fallecidos de manera desproporcionada por la pandemia, a pesar de las precauciones extremas que han incluido toques de queda, controles de carreteras, pruebas universales y la suspensión de negocios en casinos y puestos de comercio artesanal.
Lummi Nation, una tribu de 5.000 miembros que vive en una península del estado de Washington junto al océano, comenzó a ser vacunada el jueves con 300 dosis.
El anciano tribal James Scott, un trabajador de las instalaciones en la clínica comunitaria de la reserva, fue el primero en ser vacunado.
En los próximos días, las vacunas irán a la policía tribal, a los trabajadores del programa de alimentos, a los residentes de cuidados a largo plazo y a los trabajadores de la salud.
“Estamos tan felices que ni siquiera puedo describirlo”, aseguró el Dr. Dakotah Lane, director médico del Departamento de Salud Pública y miembro de Lummi Nation, mientras hacía fila para recibir su vacuna.
Lummi Nation logró mantener a raya el virus con amplias pruebas y alojamiento en cuarentena con alimentos para quienes dieron positivo, aseguró Lane.
Ha habido 133 casos de COVID-19 en la reserva de 20 millas cuadradas (52 kilómetros cuadrados), con cuatro hospitalizaciones y ninguna muerte.
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