La OTAN y Estados Unidos rechazaron las demandas de seguridad rusas clave para aliviar las tensiones sobre Ucrania, pero dejaron abierta la posibilidad de futuras conversaciones con Moscú sobre control de armas, despliegue de misiles y formas de prevenir incidentes militares entre Rusia y Occidente.
El Político
Las decisiones se tomaron en una reunión del Consejo OTAN-Rusia el miércoles, la primera de este tipo en más de dos años. Que la delegación de Rusia no abandonó las conversaciones y permaneció abierta a la perspectiva de futuras reuniones a pesar de que Occidente rechazó las demandas centrales se consideró una nota positiva en una semana de reuniones de alto nivel destinadas a evitar una temida invasión rusa de Ucrania.
El presidente ruso, Vladimir Putin, quiere que la OTAN retire sus tropas y equipo militar de los países vecinos de Rusia, que incluye a Ucrania pero también a aliados de la OTAN como Estonia, Letonia y Lituania. Putin también quiere que la alianza militar de 30 naciones acepte no admitir más miembros.
La reunión fue convocada ya que Rusia ha concentrado aproximadamente 100.000 soldados, tanques y equipo militar pesado listos para el combate cerca de la frontera oriental de Ucrania.
Rusia ha negado que tenga nuevos planes para atacar a su vecino y, a su vez, acusa a Occidente de amenazar su seguridad.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien presidió la reunión, dijo que las naciones de la OTAN y los enviados rusos “expresaron la necesidad de reanudar el diálogo y explorar un cronograma de futuras reuniones”.
OTAN ansiosa
Stoltenberg dijo que la OTAN está ansiosa por discutir formas de prevenir incidentes o accidentes militares peligrosos y reducir las amenazas espaciales y cibernéticas, así como hablar sobre el control de armas y el desarme, incluido el establecimiento de límites acordados en el despliegue de misiles.
Pero Stoltenberg dijo que cualquier conversación sobre Ucrania no sería fácil. Rusia anexó la Península de Crimea a Ucrania en 2014 y respaldó a los separatistas en el este de Ucrania. En los años transcurridos desde entonces, los combates allí han matado a más de 14.000 personas y han devastado el corazón industrial de Ucrania, conocido como Donbas.
“Existen diferencias significativas entre los aliados de la OTAN y Rusia sobre este tema” de que Ucrania pueda unirse a la OTAN, dijo Stoltenberg a los periodistas después de lo que dijo fue “un intercambio muy serio y directo” con el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, y el viceministro de Defensa, Alexander Fomin.
“Existe un riesgo real de nuevos conflictos armados en Europa”, agregó Stoltenberg.
Stoltenberg subrayó que Ucrania tiene derecho a decidir sus futuros arreglos de seguridad y que la OTAN seguirá dejando la puerta abierta a nuevos miembros, rechazando una demanda clave de Putin de que la organización militar detenga su expansión.
Fuente: El País