La promesas de la “Revolución”, un sinfín de ofrendas que jamás llegaron a concretarse. En el aspecto económico, político y social, el régimen ha proporcionado una serie de políticas públicas dispuestas a mejorar la calidad de vida del venezolano que queda en palabras y bolsillos llenos de dinero a causa de la corrupción.
Emigrante colombiana asegura que en Venezuela se “vive sabroso” https://t.co/Hn2Q8Gi7Mw pic.twitter.com/dOs7sBdhCT
— El Político (@elpoliticonews) August 31, 2017
Así sucedió con el precio del cartón de huevo de gallina. Vamos a remontarnos al 11 de noviembre del año 2015, donde Jorge Arreaza, quien para ese entonces era el Vicepresidente de la República, obligó a los comerciantes a vender el cartón de huevos a 420 bolívares cuando este costaba 1200 bolívares con la promesa de que se mantendría en ese precio y el sector comercial no generaría perdidas.
La propuesta, que fue una burla para el país, generó zozobra entre los ciudadanos que despavoridos salieron a las calles a comprar desesperadamente cartones de huevos con el miedo de que desaparecieran del mercado, como en efecto sucedió. Durante dos meses no se vieron los huevos en los establecimientos, algunos comerciantes optaban por romperlos y esconderlos, ya que no tenía sentido ofrecerlo en un precio que generaría grandes pérdidas para sus bolsillos.
Al llegar el año 2016, la situación se “normalizó”. La promesa de Arreaza jamás llegó a cumplirse, al contrario, el costo de los huevos aumenta semanalmente. Como la comida y cualquier articulo en el país, los huevos aumentaron el 2400% en menos de dos años, de 1.200 a 30.000 bolívares. Los pronunciamientos del régimen sobre el costo de este alimento y la crisis ha pasado a segundo plano, donde la culpa de la crisis siempre será de “el imperio”.
Con información de Venezuela Al Día
