La solidaridad se ha disparado con las víctimas del incendio de Pedrógão Grande, a las que se busca ayudar a través de cuentas bancarias solidarias o del envío de alimentos básicos, cuya magnitud ha llegado a causar problemas logísticos.
Menos de 48 horas después de que se declarase el fuego, que ha causado 62 muertos y 62 heridos, las autoridades han tenido que pedir a la población que deje de enviar alimentos a la zona, donde se registra "exceso de alimentación".
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Durante la pasada madrugada, la ministra de Administración Interna, Constança Urbano de Sousa, agradeció "la enorme ola de solidaridad" al tiempo que apeló a una mayor mesura en el envío de víveres, ya que "está causando algunas dificultades de logística".
Cáritas Portugal anunció que pone a disposición de las víctimas 200.000 euros que tienen como objetivo "el apoyo inmediato a las primeras necesidades" de los afectados.
La recolecta de dinero se hace también a través de cuentas solidarias dispuestas por las entidades portuguesas Caixa Geral de Depósitos (CGD) y el BCP, además de medios de comunicación, como la cadena pública RTP.
Además, se han habilitado líneas solidarias que recolectan 50 céntimos por llamada, tanto en la RTP como en la cadena privada SIC.
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La solidaridad también se ha manifestado a través de iniciativas más novedosas, como la del entrenador del Shanghai SIPG, el portugués Andre Villas Boas, quien dijo que donaría personalmente 10 euros por cada "like" que reciba una publicación sobre el incendio en su cuenta de Instagram.
Tras la favorable respuesta en la red social, el técnico se comprometió hoy a transferir un total de 100.000 euros para las víctimas.
EFE
